Objetos perdidos

Por Yopo
Cuando pierdes algo, por insignificante que sea, siempre te fastidia el día cuanto menos. Que si el paraguas, la funda de las gafas, la bufanda, o en este caso, un gorro. Por muy poca cosa que sea el objeto en cuestión, siempre maldices la hora en la que se te fue el santo al cielo y olvidaste aquella cosa... Por eso, cuando extravías algo y lo recuperas, no cabes en el cuerpo de gozo! xD
Hace unos días, un gorro con patas se esfumó. El sitio era el Museo de arte contemporáneo de Castilla y León. Lugar por el que transitan cientos de personas cada día, por lo que las esperanzas de recuperarlo se reducían al mínimo. Pero no! Resulta que la gente es bondadosa, mucho más de lo que la mayoría presumimos. Y cuál fue mi sorpresa que, después de llamar a los pocos días, me dicen que alguien lo ha encontrado y lo ha devuelto a recepción. Un alma caritativa que valoró lo que alguien estaba perdiendo, y lo puso muy por encima del beneficio personal que el gorro le podía reportar. Gracias, estimado desconocido. Y gracias a ti también, adorable gorrito, no sólo por quitar el frío, sino por devolverme la fe en la raza humana. Una vez más...