Llevo varios años teniendo plantas de Aloe vera. Cuando descubrí los pocos cuidados que requiere, y sobre todo, las propiedades que tiene, me aficioné a ella.Pretendo compartir los conocimientos que he adquirido a lo largo de estos últimos años.Cuidados:El aloe es una planta de solana, mejor que le de el sol a la sombra. Hay que procurar que la tierra no se encharque ni esté excesivamente mojada durante mucho tiempo. En cuanto al riego, comprobar primero que la tierra está seca o no muy húmeda para evitar el exceso de agua. En invierno, con regarla una vez al mes, es suficiente, y en verano, una vez a la semana.Debo decir que hay que prestar atención según sean las condiciones climatológicas de donde se encuentre. Puede pasar un invierno muy lluvioso y no necesitar regarla en meses, y en un verano muy caluroso, habrá que prestar atención a que no se muera.Si se planta en maceta, mejor de barro que de plástico. Es bueno que en el fondo tenga algunas piedras que facilite el filtrado del agua sobrante. Mejor que la maceta sea un poco pequeña, si el aloe está en una maceta muy grande, crecerán las raíces en detrimento de las hojas. Y si se planta en el suelo, mejor en pendiente o zonas altas, evitando las zonas bajas encharcables.Es una planta de exterior más que de interior. Una planta se encuentra en buenas condiciones cuando se observa que en el interior le van creciendo hojas nuevas, y sobre todo tiene hijos y florece.
Es bueno quitarlos cuando tengan unos 15-20 cm, pues le quitan fuerza a la planta madre.Cuando se trasplantan los hijos a nuevas macetas, hay que esperar al menos una semana a que cicatricen las raíces, pues si se riega enseguida, se puede pudrir. Síntomas y soluciones:Hojas enrojecidas: cuando las hojas por su parte exterior se tornan rojas, está sufriendo temperaturas extremas, tanto frío como calor. Es conveniente colocar la planta en un lugar donde parte del día le de la sombra, en el caso de sufrir insolación, y colocar la macetas en el interior, en el caso de sufrir heladas. El enrojecimiento irá desapareciendo poco a poco.Hojas flácidas y abiertas: en este caso tiene exceso de agua, mejor dejarlas de regar y ponerlas al sol, si sigue así, y no le crecen hojas, pues no tiene mucho futuro. Un remedio es cortar las hojas exteriores y trasplantar lo que queda a una nueva maceta con tierra seca.Hojas en vertical: cuando la planta presente las hojas completamente en vertical, le falta agua, hay que regarla. Esto también ocurre cuando tiene muchos hijos y le quitan fuerza, como he comentado antes.
Propiedades y usos:Como he comentado, la pulpa del aloe tiene muchas propiedades, todas beneficiosas: antiséptica, cicatrizante, anticoagulante, hidratante, antimanchas, refrescante, y un largo etcétera. Voy a dar unos ejemplos de los usos que yo le doy, aunque tiene muchísimos más:
- Para las picaduras de los mosquitos, muy eficaz.
- Después de la exposición de sol, es refrescante.
- Para las manchas en la piel, en este caso hay que ser muy constante.
- Para después de la depilación, es calmante.
- Como hidrante para el cuerpo, antes de aplicar la crema que normalmente uso.
- Para pequeños cortes y heridas, hay que ser constante y cicatrizará mucho antes.
- Aplicado a la piel antes de un tratamiento dermatológico.
- Tiene mucho poder de penetración y ayuda a que éste sea más eficaz.
- La pulpa batida la añado a la elaboración de jabón casero.
Extracción de la pulpa:Para extraer la pulpa y aprovechar todas sus propiedades, la planta tiene que tener al menos 3 años, que es cuando se considera adulta.Con un cuchillo se corta una hoja exterior por la base, se coloca en una tabla y se cortan los extremos (unos 3 cm) y los cantos.
Se trocea la hoja, y por trozos, se les va quitando con ayuda de un cuchillo la corteza. La pulpa tiene un tacto gelatinoso y baboso.
Una vez que se obtiene la pulpa, se bate en la batidora, y listo. Al batirlo se crea mucha espuma, lo que hago es meterlo en el frigorífico unas horas y poco a poco va disminuyendo.