Una de las grandes metas de las compañías de videojuegos ha sido siempre mejorar la sensación de inmersión en los juegos, para lo cual los periféricos han ido evolucionando de manera exponencial. Los controles cada vez son más avanzados, además de mejorar el manejo, nos dan cada vez más sensación de “estar dentro del juego”. Ahora las consolas utilizan, incluso, nuestros smartphones para añadir un plus a esa sensación.
La nueva apuesta de Sony para cumplir tal propósito es Proyect Morpheus, aunque todavía está en desarrollo el proyecto está pensado para introducir a los dueños de una PS4 en el mundo de la Realidad Virtual, el cual se encuentra actualmente en el punto de mira de muchas otras compañías, como es el caso de Oculus VR (propiedad de Facebook), el actual gigante del mundo de la realidad virtual, cuyo proyecto Oculus Rift es el más avanzado (y prácticamente único competidor), por el momento.
La incursión Sony en este mundo parece haber despertado el interés de Brendan Iribe (director ejecutivo de Oculus VR), el cual ha mencionado unas palabras con respecto al proyecto de la compañía nipona en una entrevista para “the guardian” (link aquí) con las que retaba a Sony a comparar sus productos, además de mostrar el miedo a que un mal producto (de otra compañía, claro) pueda amenazar el interés del público por la Realidad Virtual.