Odio.

Publicado el 13 agosto 2018 por Torrens

La gestación del problema catalán, en su versión actual de las muchas que ha habido a los largo de la historia, se inicia con la llegada del PP y Aznar al poder y se remata en junio del 2010 cuando Aznar y el PP a través del Tribunal Constitucional y con el apoyo estático y silencioso de Zapatero se cargan el Estatut votado por catalanes y el Parlamento en Madrid.

En este y en otros casos a lo largo de la historia la motivación ha sido el profundo odio que muchos, demasiados, españoles sienten por Catalunya y los catalanes, odio que primero motiva a los que encienden la mecha convencidos que la explosión les supondrá una copiosa lluvia de votos, y después de la explosión empeoran el problema en vez de solucionarlo para garantizarse cada vez más votos.

Si cuando Mas visita a Rajoy en septiembre 2012 hubiesen acordado un referéndum similar al que se organizó en Escocia el resultado habría sido un claro no a la independencia y el problema se habría acabado, pero ese era un desastroso resultado para Rajoy y el PP que habría perdido votos, y en su lugar lo que hicieron fue lo contrario, todo lo posible para empeorar el problema cada día más, aún al coste de empeorar sus ya pobres resultados en Catalunya y que los independentistas catalanes pasasen de ser cuatro gatos que cabían en un autobús pequeño a ser mayoría más o menos corta, pero en contrapartida en el resto de España se hacían los amos.

Al tiempo los medios de comunicación mesetarios explicaban el problema con la peculiar versión que unos líderes políticos nacionalistas y muy, pero que muy malos, habían convencido a media Catalunya mediante falacias que solo un idiota se creería, que la independencia era algo imprescindible, cuando la gran mayoría, por no decir todos los nuevos independentistas catalanes dicen alto y claro que quien les convenció no fueron ni Mas ni Junqueras sino Rajoy, e incluso en una asamblea de la ANC del año 2015 hubo quien propuso efectuar una colecta para financiar un monumento de gratitud a Rajoy.

Hace varios días que en Facebook se publicó un video que es una excelente prueba de dicho profundo odio a Catalunya, se refiere al famoso “a por ellos” que no fue algo insignificante en un par de poblaciones andaluzas como lo describieron medios catalanes sino repetido en muchas ciudades de toda España e incluso por la propia policía, sin que por supuesto a unos agentes tan claramente franquistas les haya ocurrido nada de nada. Se puede ver el video en el siguiente link:

https://www.facebook.com/josepmaria.perisfernandez/videos/10216151859770030/UzpfSTEwMDAwMTAxOTk0MjA5NzoxOTAxMDU2NTMzMjcxNjYw/

Tal como dice Antoni Bassas en el video del siguiente link

https://www.youtube.com/watch?v=cPOJ8qvfN1E

¿Cómo se entiende que con el independentismo vasco que generó una organización terrorista que asesinó a cerca de un millar de españoles nunca se realizó manifestación alguna, ni por ciudadanos ni por policías, ni tan solo parecidas a estas, ni se mandó a un grupo de políticos nacionalistas a prisión sin la más mínima prueba, ni, etc. etc. etc.?.

Otras pruebas las hay a montones, también estos días y también en Facebook a aparecido la siguiente foto:

El automóvil pertenece a una pareja que pasaron la noche en Juviles, un pueblo de la Alpujarra, con tan mala suerte que alguien se enteró de que eran catalanes y al día siguiente se encontraron el coche decorado patrióticamente. Lo curioso es que los propietarios son catalanes pero no ERAN independentistas, y lo escribo así porque ahora claramente lo son, aunque solo sea para pertenecer a un país en que no haya individuos como los de Juviles.

Por último, como ante los problemas el sentido del humor es una buena medicina, adjunto un artículo de Emprar Moliner, a la que considero la/el periodista con más sentido del humor de toda la península. El artículo está en catalán, pero lo he traducido y en la segunda página está en castellano. Por cierto el subrayado amarillo de algunas palabras apareció cuando copiaba palabras, y como no conseguí borrarlo se quedó como estaba. Cosas de la maldita informática.

EMPAR MOLINER