Existe una escalera social que nos pone siempre en una estructura jerárquica. Cada uno de nosotros se encuentra en un escalón, con alguien por sobre nuestro supuesto status, y alguien por debajo. En esta escalera eterna aceptamos los escupitajos que nos vienen de arriba y también nosotros pecamos escupiendo para abajo. Somos violentos cuando podemos ser violentos y nos convertimos en corderos cuando el otro es más fuerte. Las víctimas esconden en su interior a un victimario que esconde dentro suyo a otra víctima, en un juego macabro e infinito.
Ofensa muestra estos juegos de poder, los pone sobre la mesa, los lleva a extremos, pero también muestra esas pequeñas cosas que suceden en la intimidad: desde la deslegitimación hasta la trompada.
Salgo del teatro y alguien dice: "Lo que hago es que él me necesite a mí ¿entendes?". Me rio porque es una cita de la obra. Me pregunto si las casualidades existen. Estiro la mano y paro un taxi. El chofer me dice que no podemos pasar por el Congreso porque está la marcha del orgullo gay: "no sé que pensás vos, pero yo si pudiera los meto a todos en un barco y ¡chau!". Se produce un silencio incómodo que continúa hasta mi casa. Ofensa sigue repitiéndose en mi cabeza: esta historia es suya, mía, nuestra...
Recomendable.
Dramaturgia: John Hopkins
Versión: Fernando Masllorens y Federico González del Pino
Dirección: Marcelo Velázquez
Elenco: Marcelo Bucossi, Mercedes Fraile, Daniel Goglino y Alfredo Martín
Funciones: Sábados 20.30
Teatro Andamio 90
Paraná 660
Reservas: 4373-5670