A todo le ponemos precio y todos sirven de diana.
No aprendemos a escuchar a los demás. No prestamos atención a lo que dicen. Tergiversamos lo que contaron porque no alcanzamos a conocer los razonamientos que expusieron. No vemos ni imitamos lo mejor de los otros. Y sobre todo, no callamos.
Y así, es obvio que tenemos lo que nos merecemos.
Aunque tampoco en los refranes encontremos toda la razón y la sabiduría de este mundo.
- Hablar, no cuando puedas, sino cuando debas.
- Oir, ver y callar, recias cosas son de obrar.
- Hermosura sin talento, gallardía de jumento.
- Buitres y milanos, primos hermanos.
- Siempre llueve cuando no hay escuela.
- Quien deja abierto el arcón, es cómplice del ladrón.
- La mujer de buen recaudo, hincha la casa hasta el tejado.
- Perros que lobos matan, lobos les matan.
- Dar santo y bueno, pero del pan ajeno.
- Vivir bien y beber bien y a todo decir amén.
- Burlas suaves, traen burlas graves.
- Burro adornado, busca mercado.
- Quien se quema, fuego lleva.
- No hay negocio sin quiebras.
- Barra y cal encubren mucho mal.
- Cada uno para sí y Dios para todos.
- Quien de mano ajena come el pan, come a la hora que se lo dan.
- El amor y la fe en las obras se ven.
- Para el último no hay cuchara.
- Compuesta, no hay mujer fea.
- Bien está lo que bien acaba.
- El bien y el mal en la cara sal.
- Dádiva de ruín a su amo parece.
- La liebre es de quien la levanta y el conejo de quien lo mata.
- En casa chica y en largo camino, se conoce al buen amigo.
- Vende público y compra secreto.
- No hay dinero tan bueno como el ajeno.
- Gatos y mujeres, buenas uñas tienen.
- La compañía del malo, no puede traer más que daño.
- Llanto de mujer y lluvia de verano, pasan volando.
- Quien tiene dos y gasta tres, eso de más que gasta hurtado es.
- Quien tiene viñas, tiene riñas; aún así, es bueno tener viñas.
- El hacer bien a villanos es echar agua a la mar.
- De la mujer, del tiempo y de la mar, poco hay que fiar.
- La capa del diablo, nunca tapa por todos lados.
- Hijo de viuda, o mal criado o mal acostumbrado.
- Más vale rico pobre, que pobre rico.
- Corazones quiere Dios, hígados no.
- Lo bien aprendido para siempre es sabido.
- Goza de tu poco mientras busca más el loco.
- Viniste al mundo desnudo y te vas amortajado; algo has ganado.
- ¡Qué alegría dan los huéspedes cuando se van!.
- No hay peor cuña que la de la misma madera.
- Agua que corre, nunca mal coge.
- Más fácil es alcanzar que merecer.
- Ni abril sin flores, ni juventud sin amores.
- Sueño sosegado, no tiene nublado.
- Harto pide quien bien sirve.
- Resfriadas, duelen más las llagas.
- Al bien buscarlo y al mal esperarlo.
- Tu arca cerrada y la llave guardada.
- Las palabras buenas son, pero, ¿y la intención?
- Contra fortuna no vale arte ninguno.
- Para ser desgraciado, cualquier rumor basta.
- A las diez en la cama estés, y si puedes a las nueve.
- En chimenea pequeña, cabe poco humo.
- Los hombres son como los borregos: lo que hace uno hacen ciento.
- La oportunidad se presenta tarde y se marcha pronto.
- Más vale ser un buen pobre que un mal rico.
- Traga vino lo saben todos; beberlo, pocos.
- Busca su mal quien se mete en berenjenal.
- Dar limosna con tambor no agrada a ningún señor.
- Callar y obrar por la tierra y por el mar.
- Los años del pobre pesan el doble.
- Cama de novio, dura y sin hoyo.
- Si secretos quieres saber, búscalos en el pesar o en el placer.
- Contra dos, sólo Dios.
- La sopa da igual mucha que poca.
- Al hombre de más saber, una mujer sola le echa a perder.
- Harto ayuna quien mal come.
- No hay cachito de cielo como el de mi Tierra.
- Sin perro, sólo Dios del cielo.
- A cuentas viejas, barajas nuevas
- Haya cebo en el palomar, que las palomas solas vendrán.
- Coma el buen bocado quien antes comió el malo.
- El que en casar acierta, en nada yerra.
- Olla sin sal, ni el gato la comerá.
- Donde hay patrón no manda marinero.
- Coger mucho quien sembró poco, es ambición de loco.
- Cuando comas pan reciente, no bebas agua de la fuente.
- La cosa está que arde, Velarde.
- Ande yo caliente, y ríase la gente.
- Si se quema la casa, nos calentamos.
- Afanar, afanar y nunca medrar.
- Nadie diga de esta agua no beberé.
- El ama brava es llave de su casa.
- Amor trompero, tantas veo, tantas quiero.
- Donde hay amor, hay dolor.
- En arca abierta, el justo peca.
- Arco que mucho brega, o él o la cuerda.
- Asno de muchos, lobos le comen.
- Al ave de paso, cañazo.
- Al año tuerto, el huerto.
- El bien suena y el mal vuela.
- De la mano a la boca se cae la sopa.
- Bodas largas, barajas nuevas.
- El que se casa por todo pasa.
- De buena casa, buena brasa.
- La cabeza blanca y el seso por venir.
- Al cabo de un año, tiene un mozo las mañas de su amo.
De nuestra revista literaria
"Pernía"
(1983-1988)