Si un hombre, quiere tener un hijo varón, sólo ha de dar de beber a la mujer encinta, vino con intestinos de liebre pulverizados.
Para saber si una mujer dará a luz un hijo varón, solamente hay que mirar sus pechos; si el izquierdo está más abultado, el recien nacido será niña, si ocurre al contrario, será niño.
Esta joya, fue escrita por el teólogo Alberto Magno, y fue entregado aun párroco, para comprender mejor a las mujeres.
En esta ocasión, no voy a añadir valoración personal, porque el contenido, lo dice todo...