Encontrando hoy en día cerca de 575 ejemplares de éste árbol, están todos perfectamente alineados, y algunos ejemplares, de tronco corto y retorcido, poseen hasta cuatro pies, más de dos metros en la base y pueden tener cerca de los dos siglos de vida. Destacamos dos de ellos: el primero situado según comienza el paseo por la calle del cementerio, en la pradera de la izquierda, pasados los 5 primeros olivos y el segundo muy próximo a la plaza de los chopos, junto a dos pinos y a la orilla del camino.
(Pincha en la imagen para ampliarla) | El parque en 1994
Los olivos son de varios pies, con troncos muy gruesos, y el suelo está labrado esmeradamente, lo que le da una personalidad de olivar en cultivo pese a tratarse de un parque público.
Algunas praderas y caminos así como bancos y otros elementos dan un servicio de espacio público muy adecuado para sus vecinos. Un parque donde la sombra es aportada por los olivos, dada sus copas bien pobladas y su marco de plantación estrecho.
(Pincha en la imagen para ampliarla) | El parque actualmente
El diseño triangular del parque se estructura en torno a una plaza central de la que salen varios ejes que confluyen en un camino perimetral circular que atraviesa a su vez varias plazas. Existen dos zonas claramente diferenciadas desde el punto de vista botánico: la formada por el antiguo olivar que ocupa la mayor parte del parque, y la zona ajardinada perimetral, paralela a las vallas que lo delimitan y que alcanza su máxima extensión en la entrada.
En cuanto a la fauna en este parque no es muy variada ni numerosa. Podemos encontrar diferentes aves o insectos típicos de medios urbanos, en función de la época del año en la que estemos. En los meses de otoño e invierno petirrojos y durante el verano abubillas o vencejos. También podremos encontrar paloma torcaz o gorriones.