#OlotMésB: cuando la regeneración urbana integrada y participativa se hace realidad

Por Paisajetransversal @paistransversal
Indudablemente, la regeneración urbana de los barrios más desfavorecidos de nuestros municipios constituye uno de los principales retos actuales del urbanismo. Combatir la desigualdad urbana desde una perspectiva integrada y participativa debería ser el eje principal de las políticas urbanas de cara las próximas décadas. Este objetivo, no obstante, no está exento de dificultades. Tal vez la principal de ellas es que la regeneración urbana integrada ha ido asociada a grandes inversiones económicas de carácter infraestructural y habitacional generalmente ajenas a las necesidades de la población y otras problemáticas de carácter más social o ambiental.
Por ello hace unos años en Paisaje Transversal comenzamos a reflexionar y diseñar una metodología de trabajo que nos permitiera abordar las transformaciones urbanas de nuestros barrios desde una perspectiva integral y participativa, que pusiera el acento en el proceso. Y comenzamos a ponerla en práctica. No sin dificultades, claro está. Por eso hoy podemos sino estar felices de que procesos que comenzaron hace años comienzan a dar sus frutos a través de las actuaciones que se diseñaron y programaron en su momento. El camino ha sido largo y complicado, incluso hay quien seguramente pensó que esto no llevaría a ningún lado, pero hoy podemos decir que esta nueva manera de afrontar la regeneración urbana es una realidad con resultados tangibles. A continuación os relatamos el caso del Plan Integral de Acciones de Mejora (PIAM) para el barrio Sant Miquel de Olot.
#OlotMésB: El camino que lleva del proceso al Plan y del Plan a las acciones
+B, Sumem des dels Barris (#OlotMésB) es un proceso que se inició en 2014 para decidir, planificar y probar cómo mejorar los barrios de Olot a partir de una prueba piloto en Sant Miquel – Les Tries. Un proceso innovador en cuanto a que la participación y la negociación se plantearon desde el inicio como elementos centrales del proyecto, al mismo nivel que el trabajo técnico, generando herramientas para abrir la participación tanto a la vecindad como al resto de la población de Olot, involucrando incluso a aquellas personas que, tradicionalmente, no se sienten llamadas a participar en este tipo de procesos.
Olot Més B seguía los principios de la metodología de regeneración urbana desarrollada por Paisaje Transversal, una herramienta con el objetivo de impulsar la regeneración integral y participativa de barrios y zonas vulnerables testada previamente en el proceso bottom-up  VdB en el madrileño barrio Virgen de Begoña.
En el caso de Olot, primero se desarrolló un diagnóstico participativo recogiendo propuestas y opiniones de todos los agentes involucrados en el proceso, lo que aportó una visión cualitativa de las necesidades y las oportunidades del barrio. En paralelo, se desarrolló un trabajo técnico de análisis y diagnóstico del barrio en base a una serie de indicadores y temáticas: entorno natural, espacio público y movilidad, paisaje urbano, actividad económica y cohesión social.

A partir de los Indicadores Participativos [InPar], se relacionan ambos estudios para poder valorar conjuntamente los criterios de sostenibilidad de un espacio urbano con las percepciones que los ciudadanos tienen de estos mismos temas, extrayendo así conclusiones y estrategias para la siguiente fase.
Con estas bases se definió como estrategia un Plan Integral de Acciones de Mejora (PIAM) para los próximos ocho años, donde se recogen las distintas acciones a implementar, definidas y programadas temporal y presupuestariamente, junto con un catálogo de tácticas que sirven de acompañamiento.
Ya en 2015 comenzaron a ejecutarse algunas de las acciones contempladas en el PIAM como la adecuación de la plaza central del barrio o de algunos miradores. Actuaciones que proseguían por la senda abierta a través de las tácticas urbanas que ya se realizaron en su momento. Pero no ha sido hasta el año pasado cuando se le dió el impulso definitivo a la ejecución de las acciones previstas en el Plan.

Para poder llevar a cabo estas actuaciones, temporalizarlas y priorizarlas, a principios de 2016 se constituyó el Consejo de barrio de Sant Miquel, donde participan entidades del barrio, vecinos y vecinas y representantes del Ayuntamiento de Olot. Y durante este primer año de actividad, con un presupuesto de 150.000 euros, se han aprobado y realizado las siguientes acciones:
  1. Reapertura de la guardería municipal.
  2. Aparcamiento en la calle Rei Martí l’Humà. Se ha comprado el solar trapezoidal que ha permitido aumentar el número de plazas de parking disponibles en el barrio.
  3. Pacificación y señalización de la carretera de Les Feixes, donde confluyen peatones, ciclistas y vehículos. Se quiere pacificar para hacerla menos peligrosa y permitir desarrollar el camino de peatones y bicicletas entre Sant Miquel y el Morrot.
  4. Adecuación del paseo fluvial, desde el Parque de los Nidos hasta la báscula de Les Tries.
  5. Instalación de nuevo mobiliario y adecuación del entorno en el Parque de los Nidos.
  6. Colocación de parklets en la Avenida Girona, extensiones del espacio público peatonal de la acera sobre la calzada.
  7. Señalización ciclista en la Avenida Girona.
  8. Adecuación del local en la calle Rei Martí l’Humà. Se han unido dos locales para convertirlos en un único espacio polivalente para ser utilizado por las entidades y personas del barrio.
  9. Camino que une los barrios de Sant Miquel a El Morrot, acondicionando el recorrido para peatones y bicicletas (no para vehículos motorizados) y siendo un camino escolar seguro. Asociado a este camino, también se harán instalaciones deportivas y de ocio para los jóvenes que en estos momentos sólo disponen de la plaza de Sant Miquel.
  10. Derribo de dos viviendas en estado deficiente en la calle de Sant Miquel.
  11. Adquisición de dos parcelas para construir un nuevo ABS. El resto de espacio se pondrá a disposición de los vecinos de Sant Miquel que, en el Consejo de Barrio, decidirán su finalidad.

Como se puede comprobar todas son acciones que abarcan diferentes temáticas y por tanto están encaminadas a garantizar la integralidad del Plan. Puede que muchas de ellas sean intervenciones de menor calado, pero su valor reside no solo en que forman parte de un Plan de mayor rango, sino que provienen de un proceso que así las ha consensuado. Y es que, el urbanismo también debe atender a lo pequeño y cotidiano, no sólo a las grandes obras infraestructurales o la promoción de vivienda.
En definitiva de lo que se trata es de poner en valor una nueva forma de afrontar la regeneración urbana en la que muchas acciones juntas y, lo más importante, amparadas en una estrategia y un marco común-integrado, pueden transformar la realidad de un barrio y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Y ahí está el PIAM de Sant Miquel de Olot para demostrarlo.



 Créditos de las imágenes:
Imagen 01: Foto aérea de las actuaciones programas del PIAM de Sant Miquel (fuente: Paisaje Transversal)
Imagen 02: Resultado del cálculo Indicadores Participativos [InPar] para el diagnóstico del PIAM de Sant Miquel (fuente: Paisaje Transversal)
Imagen 03: Intervención de mejora de la Plaça Sant Miquel (fuente: Comarca d'Olot)
Imagen 04: Adecuación del paseo fluvial y parklets en la Avenida Girona (fuente: Ajuntament d'Olot)
Imagen 05: Plano de las actuaciones del PIAM (fuente: Paisaje Transversal)