Debemos dejar atrás las cosas del pasado y comenzar a perdonar para empezar a CRECER. A veces estamos tan preocupados en los recuerdos del pasado que no vivimos nuestro presente y tampoco proyectamos nuestro futuro.
Crecer no hablo de estatura, sino interiormente. A veces necesitamos crecer por dentro, empezar a entender que si las cosas pasaron por algo tienen un por qué, y quizás nos ayudarán a crecer interiormente.
El año pasado nadie era igual que ahora, ni yo tampoco, porque lo percibo, lo siento, las cosas las tomo de otra manera. Cuando viene algo malo, recuerdo las metas que tengo por cumplir, y eso me hace feliz, me hace sentir que tampoco es tan malo lo que sucede.
Todos cambiamos en algún momento de nuestras vidas, algunos para mal y otros para bien, pero eso somos, un cambio constante. No hay una edad límite para dejar de cambiar, siempre estamos en pleno cambio, porque muchas veces las situaciones nos llevan a ese cambio.
Hay dos razones por las cuales alguien puede cambiar:
- Una es porque desea cambiar, porque piensa que siendo como es lastima a muchas personas, entonces va en busca del cambio, recurre a una ayuda si sola no puede pero lo logra. Es voluntario.
- Otra de las razones son las circunstancias, a veces te pasan cosas en la vida que te llevan a ese cambio. Es involuntario.
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