ONG pidieron al G20 que aborde en profundidad la erradicación del hambre

Por Masonaprendiz
Diferentes ONG han coincidido en demandar a los líderes reunidos en la cumbre del G-20 que se celebró estos días en Cannes (Francia) que abordaran en profundidad la erradicación del hambre en el mundo vez de centrarse "sólo en el rescate de Grecia".
Así, Intermón Oxfam ha exigido que alcancen un acuerdo de mínimos en materia de volatilidad de los precios de los alimentos y sobre imposición de tasas a actividades como las transacciones financieras internacionales o el transporte marítimo para promover el desarrollo y la lucha contra el cambio climático. 
En cuanto a las tasas internacionales, la portavoz de Intermón Oxfam, Susana Ruiz, ha explicado en declaraciones a Europa Press que si bien "la oposición de Reino Unido y Estados Unidos es muy fuerte" ante la posibilidad de gravar las transacciones financieras y "va a ser complicado llegar a una conclusión final", la ONG espera "avances" por el apoyo manifestado por países como Brasil o México. 
Además, la ONG celebra que tras el informe ofrecido este jueves por Bill Gates ante el G-20, se haya puesto sobre la mesa la posibilidad de imponer tasas al transporte marítimo, responsable del tres por ciento de las emisiones de CO2. Ruiz ha señalado que si bien falta dar una perspectiva práctica a esta idea, en su opinión es posible "el éxito" porque "aunque Estados Unidos se opone, con el respaldo de la mayoría de los países puede salir adelante" un acuerdo.
Otro de los asuntos que están sobre la mesa es la volatilidad de los precios de los alimentos. Oxfam Internacional, al igual que otras entidades, viene reclamando mayor transparencia para identificar y fiscalizar a los agentes involucrados en las alteraciones del coste de las materias primas, ya que en la actualidad, trabajan sobre la especulación en mercados no bursátiles y, por tanto, menos controlados. 
"La Unión Europea ya está trabajando y en Estados Unidos también hay propuestas, pero el respaldo del G-20 es lo importante porque significa que todos los miembros reconocen la necesidad de tomar iniciativas. Sería un mínimo, una posición común y consiguiéndola, sería más fácil armonizar medidas por ejemplo, en la UE, e intentar frenar la presión de los lobbies financieros", ha explicado. 
Por eso, la ONG insiste en que el G20 debe conseguir por lo menos, una declaración conjunta que señale la necesidad de emprender este tipo de regulaciones a fin de marcar un punto de partida para todos los países. Para Ruiz, está claro que es una cuestión de "voluntad política" y del modelo de sociedad que se quiere crear. 
Además, Intermón pide un acuerdo que sea eficaz en la lucha contra la evasión fiscal y celebra que Estados Unidos se haya sumado a esta corriente. "Es una de las cosas en las que esperamos que haya avances, aunque me cuesta ser triunfalista porque ya en 2009 decían que se iba a acabar con los paraísos fiscales y las medidas no fueron eficientes", ha señalado Ruiz. 
Según ha explicado, es "un paso importante" que se haya firmado en el G20 la Convención Multinacional de Cooperación Fiscal, aunque deben sumarse los países que actualmente se consideran paraísos fiscales. El objetivo del acuerdo es favorecer el intercambio de información para poder perseguir la evasión hacia ciertos destinos. Sin embargo, como ha reconocido, hasta que no lo firmen los Estados directamente implicados, "no será suficiente". 
"A LAS CALENDAS GRIEGAS"
Por otra parte, Acción contra el Hambre ha denunciado que en Cannes se está hablando de regulación y de rescate, "pero claramente reducir el hambre mundial no está en la agenda de la cumbre" porque la crisis griega "está antes que cualquier otra cosa" incluso por encima del hecho de que "casi mil millones de personas en todo el mundo pasan hambre". Por eso, la ONG opina que la seguridad alimentaria ha sido "enviada a las calendas griegas".
Para la presidenta de la Red Internacional de Acción contra el Hambre, Benoit Miribel, "el G-20 tiene tanto la capacidad como el deber de revertir esta lacra" ya que si se centra "únicamente en el rescate del euro, fallarán las medidas en cuanto a la seguridad alimentaria mundial, que se plantean demasiado tímidas para hacer frente al desafío". 
En esta línea, la ONG explica que mientras el G20 pide transparencia en los mercados agrícolas, "todavía no existe una regulación clara a este respecto" y aunque se ha hablado de crear un foro de respuesta inmediata en caso de que se produjeran nuevas crisis, "hasta la fecha no tiene ni mandato ni medios para actuar". "Como viene siendo habitual, se identifican los problemas y se comparten, pero no se toman las decisiones oportunas", ha apostillado.
Save the Children ha añadido un dato a la importancia de aprobar medidas para controlar el precio de los alimentos: la subida de las materias primas "ha puesto en peligro las vidas de 400.000 niños y niñas en lo que va de año" y si bien el G8 reunido en L'Aquila en 2009 alcanzó un compromiso entre 13 países para donar 22.000 millones de dólares que auxiliaran a los agricultores más pobres, a un año de la fecha límite tan sólo se ha donado el 22 por ciento de lo prometido. 
Mientras, la desnutrición es ya la causa de casi un tercio de las muertes de niños cada año y uno de cada tres niños que viven en países en desarrollo sufre retraso en su crecimiento, lo que dificulta su aprendizaje en la escuela y posteriormente la oportunidad de encontrar un trabajo. "El G20 debe aprovechar esta cumbre para acordar un plan de acción que aborde esta crisis y demostrar que los más pobres no están en el último lugar de la agenda", ha indicado la responsable de Incidencia política de Save the Children, Yolanda Román.  Fuente: EUROPA PRESS
Sobre el hambre en el mundo 2011: los precios de los alimentos permanecen elevados y volátile