La sociedad sufre una crisis económica brutal. La única forma de poder aspirar a una vida mejor consiste en pertenecer al 3% de jóvenes que logra superar unas duras pruebas y formar parte de los privilegiados que viven en un mundo muy diferente al que conocen.
Esta es la premisa inicial de 3%, la primera producción de Netflix en Brasil. Admito que la comencé a ver por casualidad, pero también he de reconocer que me enganchó desde el primer capítulo. Sin desvelar demasiadas cosas (al menos no más allá del primer capítulo), intentaré contar qué ocurre y cuál es mi opinión.
Por otra parte, no todo el mundo está de acuerdo con este sistema meritocrático, y existe una pequeña resistencia que planea acabar con esta deformada selección darwinista. Para ello, en las pruebas de este año logran infiltrar a alguien con la intención de desbaratar el proceso.
En el discurso de bienvenida de Ezequiel, el responsable de las pruebas, nos enteramos de que solo un pequeño porcentaje de los candidatos logra finalizarlas (sí, el 3%). Ya durante el primer capítulo vemos cómo algún participante juega sucio con tal de lograr pasar a la siguiente fase, y eso no es nada en comparación a lo que irá sucediendo en posteriores episodios. Me vinieron a la mente películas como El método o incluso Cube, principalmente por esa evolución en los personajes cuando van siendo sometidos a cada vez más presión.
Recapitulando, actuaciones entre correctas y buenas, y una historia que no acaba de tener originalidad, aunque está muy bien desarrollada. Si alguna de las dos películas que he mencionado arriba os gusta, os la recomiendo, al igual que si os apetece ver un thriller más cerebral que de acción. Yo me vi los primeros cuatro capítulos seguidos, con eso os digo todo.