A Pierre-Marie, un escritor de éxito en plena crisis creativa, la sorpresa le llega un buen día a su buzón en forma de paquete enviado por una de sus lectoras. ¡Y qué lectora! Adeline Parmelan, «grande, gruesa y morena», quien podría convertirse en su más terrible pesadilla. Pero en lugar de eso, ambos inician una intensa, divertida e inteligente correspondencia por e-mail y se convierten en indispensables el uno para el otro… Hasta que salen a la luz el contenido del paquete postal, casi olvidado en la mesa del estudio del escritor, y los secretos que alberga.
No negaré, que nada más empezar a leerlo regresé al pasado de la mano de Daniel Glattauer y su "Contra el viento del Norte". Los mails como medio de contacto, dos personas que no se conocen, pero en este caso, no hay ninguna equivocación en enviar el mail, porque en este libro las casualidades no existen. Un libro lleno de mails, tristes, alegres, divertidos, esperanzadores, alocados...puede que sean unos diferentes a otros, aunque traten un mismo tema, pero tienen algo en común, están escritos con el corazón. No es una novela cualquiera, creo que puede empezar como una típica novela de escritor recibe paquete y la chica le contesta...pero es más profundo que el enviar una simple carta. Aunque el lector no es consciente, se mete en una historia del pasado que todavía duele, que deja huella, en una búsqueda sin frutos, en algo extraño. Puede que con las primeras 20 páginas, os decidáis tomar un descanso, pero la curiosidad mata al gato, y en este caso el lector, sentirá ganas de conocer ¿Qué esconde ese misterioso envío? Conforme avanzan las páginas, la curiosidad que tenias pasa a un segundo plano y te olvidas del paquete. Aparecen nuevos personajes y algún fantasma del pasado regresa y empiezan los enredos. Miénteme, te creeré, destaca por la pluma de los dos autores, por como alguien desconocido puede transtocarte todos los planes, por como el miedo a lo que sucederá cuando...son muchos matices los que hacen que esta novela sea inteligente y se aleje de lo convencial. Nunca antes, unos mails tan impersonales al principio, se convertirían en algo tan fantástico, el lector incluso, puede ir de casa del protagonista Pierre- Marie a la casa de Adeline, intentando poder ver los rostros de estos personajes, intentando intuir sus emociones.... Una novela que he tardado tiempo en leerla pero como he dicho en twitter "hay libros que tardas en leer, pero al terminarlos, te quedas como vaci@" Pues así me quedé yo, sobre todo con ese final, del que no hablaré, no os preocupéis. Antes os hablaba de que las casualidades no existen, pero ¿el destino? en este caso, Anne-Laure Bondoux y Jean-Claude Mourlevat unen estas dos cosas, con otras más y hacen que, Miénteme, te creeré, sea un libro que leas con ganas de que el destino y las casualidades ganen. Creo que me quedo con el personaje de Adeline, un personaje femenino que tiene mucho que dar y mostrar al lector. Miénteme, te creeré ha sido un buen compañero de viajes cibernéticos.