Opinión de Una grieta en el espacio de Madeleine L'Engle

Por Miss_cultura @miss_cultura
2 nov. 2017
Después de que Charles Wallace le dice a su hermana Meg que ha visto dragones en el huerto de su casa, los hermanos Murry reciben la sorprendente visita de Blajeny, un sabio Profesor proveniente del espacio, y de Proginoskes, un querubines con cientos de ojos y alas que se torna invisible a voluntad. Tanto Meg como su amigo Calvin son llevados a una galaxia remota donde verán que el Universo se está «agrietando», y recibirán la noticia de que la vida de Charles está amenazada por una enfermedad que se desarrolla en el interior de sus mitocondrias. Para reestablecer el equilibrio del Universo enfermo, Meg y Calvin, acompañados por Proginoskes y un inesperado aliado, tendrán que viajar al interior de Charles, donde descubrirán que el cuerpo humano es un universo tan grande como el que contiene las estrellas. Una vez más, Madeleine L’Engle demuestra por qué es una de las narradoras capitales dentro de la literatura juvenil de fantasía en esta aventura llena de ciencia, mística y corazón.

Charles Wallace está muy enfermo y el universo se está resquebrajando. Algo los está destruyendo a ambos y Meg tiene que superar tres pruebas para restablecer el bienestar de su hermano y de su hogar. Pero, por supuesto, no estará sola. Su amigo especial, Calvin, estará a su lado, así como una serie de personajes fantásticos que más vale que vayáis conociendo sobre la marcha.
Una grieta en el espacio forma parte de la serie El quinteto del tiempo, de la que Una arruga en el tiempo fue la primera entrega. Aunque son continuación, se trata de una serie, no una saga, por lo que se pueden leer de forma independiente. Los personajes son los mismos, claro, y también sigue una estructura similar a la anterior: alguien ve algo extraordinario y, a partir de ahí, se ven envueltos en una aventura con el objetivo de traer a un miembro de la familia de vuelta.
Antes de continuar quiero poner un par de cosas en contexto: 1. Estas novelas se publicaron por primera vez durante las décadas de los sesenta y setenta. 2. Diga yo lo que diga, seguramente no le haga justicia al libro. Creo que es una de las reseñas más complicadas a las que me he enfrentado nunca.
Debo confesar que la mayor parte del tiempo, mientras leía, me sentía totalmente desorientada, sin entender bien dónde me encontraba ni qué estaba sucediendo. Una grieta en el espacio es un libro cargado de fantasía y de elementos de ciencia ficción, supuestamente dirigido a un público infantil y salpicado con aspectos relacionados con la religión, la ciencia o la filosofía.
Como digo, yo estaba muy perdida hasta que en un momento dado algo hizo clic y de repente todo tuvo sentido. Y ese momento me pareció sublime y mágico. Me arriesgaría a decir que este libro esconde una interpretación distinta para cada lector que se acerque a él e incluso para cada una de las lecturas realizada por un mismo lector, dependiendo de la edad y del momento de su vida en el que se encuentre. Madeleine L’Engle contó una historia para todos los públicos que, a través de los años, cobra vida con cada lector y que, por eso, sospecho que jamás se quedará anticuada.
Nada más empezar ya nos encontramos con un problema tan de actualidad que parece que en realidad lo escribieron ayer: el acoso escolar. Charles Wallace sufre acoso por parte de sus compañeros por ser diferente. Después nos habla del universo y de cómo nuestro propio cuerpo se asemeja a él. Cada pequeño elemento que habita en la Tierra afecta a su funcionamiento, del mismo modo que la más pequeña de las células influye en nuestra salud. También nos habla de la importancia que tenemos por el simple hecho de ser y de cómo podemos elegir mirar las cosas con odio o con amor.
Y así, como detalle: la edición por parte de Gran Travesía es preciosa. Estoy enamorada de las guardas del libro.
En resumen: si os gustan los libros que sorprenden y hacen reflexionar mientras cuentan una historia llena de fantasía, no podéis perderos las aventuras de Meg y Charles Wallace. 
Y, por cierto, en primavera del próximo año se estrena la película de Una arruga en el tiempo. Os dejo por aquí el tráiler:

 —Opinión de Inés Díaz Arriero—