Algo más de dos semanas hace ya desde el cierre de la mítica compañía, pero es una herida que tardará algún tiempo en cicatrizar. Un vacío en nuestros corazones que nisiquiera un pollo de goma con una polea en el centro podría rellenar. Y es que son muchos y muy pesados los títulos que la compañía que fundara George Lucas nos deja para el recuerdo.
Una pequeña parte de la colección del propio Ron Gilbert. Qué no darían muchos por echarle el guante a esas cajas…
Muchos de nosotros, y en especial un servidor, comenzó en los videojuegos durante el auge de dos poderosas compañías como lo fueron Sierra y LucasFilm Games, reyes aun a día de hoy del género de la aventura gráfica, y al igual que lo hiciera Lucas, muchos nos estrenamos de la mano de Maniac Mansion, una de las grandes obras de Tim Schafer que a la postre trajo a modo de secuela un juego aun mejor si cabe como lo fue El día del tentáculo. Pero me atrevería a decir, pudiendo no tener razón, que la fama y gloria de la compañía vino a través de su saga por excelencia, hablo por supuesto de Monkey Island.
¡Hola! Me llamo Guybrush Threepwood, ¡y quiero ser un pirata!
Este valeroso pirata sigue siendo a día de hoy un símbolo para todo gamer que se crió con sus aventuras, y es que el amor que procesamos muchos por esta maravillosa saga no cesa pese a que en los últimos años la saga ha ido a menos. No solo integrando unos gráficos 3D que no han sido del agrado de todos, sino con una falta de dificultad bastante considerable y unos guiones que mucho le tienen que envidiar a la tercera entrega, pero sobretodo a las dos primeras creadas por Ron Gilbert, el cual no lo dudó a la hora de bromear, dentro del homenaje, el día que Disney cerró la que fuera su casa a principios de los 90.
Tal es así, que a día de hoy después de más de una década sin crear ninguna de estas historias (a excepción de los nuevos títulos de Star Wars), y aun sabiendo que no vendrían mas historias en el futuro, sentimos que una parte de nosotros muere con la compañía. Ese niño que se sentaba delante del ordenador a descubrir un universo diferente, y que ahora está triste echando de menos a un buen amigo que, irónicamente, nos deja de la mano de otro icono de nuestra infancia como lo es Disney.
No quisiera tampoco olvidarme de otros grandes títulos que, al igual que los mencionados anteriormente, nos han dado tantísimo. Juegos como Zak McKracken, Loom, Full Throttle, The Dig, Sam y Max o el inigualable Grim Fandango. Pero sus correspondientes homenajes individuales seguirán viniendo en el futuro.
Tampoco querría alargar la despedida más de la cuenta, con lo que finalizaré profesando una admiración total y absoluta a todos aquellos que hicieron posible la creación de estas maravillosas obras, sin las cuales, muchos no seríamos los mismos a día de hoy.
A los señores George Lucas, Michael Land, Dave Grossman, Tim Schaffer y Ron Gilbert y a tantos y tantos que formaron en algun momento parte de la familia de LucasFilm Games, gracias, gracias de corazón.
Carta de ron: