Posturas críticas hemos tomado organizaciones lésbicas, trans, gays, bisexuales y activistas independientes de nuestro país frente al manejo del gobierno en la elaboración del proyecto de regulación civil de parejas. Denunciamos la manera de actuar discriminadora y sectaria, cuya práctica deja de lado a las personas trans, lesbianas y otros sectores importantes e históricos que hacen parte del mundo de la diversidad sexual en Chile.
Las organizaciones y activistas de la diversidad sexual presentes tenemos una gran trayectoria, algunas contando con más de 30 años de lucha por los derechos de las personas lésbicas, trans, bisexuales, gays y otrxs en nuestro país. Las transformaciones sociales, culturales, simbólicas, políticas y legislativas en Chile, son producto de la lucha y el trabajo sostenido de estos grupos, colectivos y activistas que hemos estado generando instancias de incidencia y disidencia desde distintas áreas.
Los cambios que se pretenden desarrollar deben tomar en cuenta las distintas voces que formamos parte de la diversidad sexual en nuestro país. Al día de hoy, solamente se está consultando un sector privilegiado y elitista de la diversidad sexual, dejando de lado otras voces que, históricamente, hemos estado presentes desde distintos frentes de acción. Aunque podamos acordar debatir cualquier iniciativa que vise regular las relaciones de parejas de un mismo sexo en Chile, nuestra prioridad actualmente es una ley contra la discriminación inclusiva y efectiva.
Valoramos el trabajo de todas las entidades de la diversidad sexual que existen y el accionar realizado en sus respectivas agendas. Sin embargo, nos preocupa la práctica del gobierno de actuar sectariamente a espalda de la ciudadanía. Por ello, exigimos que se escuchen a todas las organizaciones de la diversidad sexual con la misma legitimidad, fuerza, disposición e intensidad.