Hace un par de años publiqué una receta de tarta de maracuyá, pero es bastante complicada, así que esta vez quise experimentar con otra versión, y quedó espectacular.
Por si tienen ganas de probar hacerla, porque la verdad es mucho más fácil (creo que lo más complejo es conseguir el jugo de maracuyá), se las dejo para que se inspiren y regalen a alguien querido también.
Tarta Mousse de Maracuyá
Tarta: Mezclar 50 gr manteca, ¼ taza azúcar, 1 huevo, ½ cta ralladura de limón, 1 ½ taza harina, 1 cta royal, ¼ cta sal.
Si tienen una procesadora grande, poner los ingredientes en ese orden y preparar la masa allí, queda súper suave y homogénea (se puede agregar un chorrito de líquido si ven que fuerzan mucho la máquina). Una vez lista, forrar una tartera enmantecada y llevar a la heladera una media hora (esto es para que la masa no se encoja en el horno) antes de hornearla. Hornear hasta que esté dorada y reservar.
O pueden comprar una masa de tarta en el Súper y saltarse un paso en la preparación, si les soy sincera, es lo que yo hice ;)
Relleno: Batir 3 yemas con ½ taza azúcar; cuando la yemada esté bien armada, agregar 1 cucharada de maicena y 2 sobres de gelatina sin sabor. Mezclar todo y agregar 2 tazas de jugo de maracuyá (si consiguen jugo de maracuyá sin endulzar, del tipo concentrado, es mejor; en ese caso pongan 1 taza de jugo y 1 taza de agua). Llevar la mezcla a fuego lento hasta que apenas hierva y espese (¡cuidado que no se les vuelque!). Retirar y esperar a que esté frío pero no coagulado.
Por último, batir 3 claras a nieve con ¾ taza de azúcar. A este merengue agregarle con movimientos suaves la mezcla de maracuyá. Verter sobre la masa previamente horneada y llevar a la heladera.
Cuando la mezcla anterior se haya cuajado, se puede cubrir con gelatina de maracuyá, no es imprescindible pero queda rico y bonito.
Gelatina de maracuyá: Mezclar 1 taza de jugo de maracuyá con 1 sobrecito de gelatina sin sabor, llevar al fuego y calentar hasta que la gelatina se mezcle bien, retirar del fuego y agregar otra taza más de jugo frío. Verter con cuidado sobre el mousse y volver a llevar a la heladera.
Decorar con merengue italiano.
Tiene buena pinta, ¿verdad? ¡Vamos a ver qué dicen los agasajados esta noche!
EriSada