Sinopsis Editorial:
En los noventa, Rachel Walsh era un desastre. Pero, después de pasar por una clínica de desintoxicación, todo mejoró. En estos momentos tiene una vida llena de amor, una familia y un buen trabajo como consejera en adicciones. Además, es capaz de mantener vivo su jardín y el único vicio que le queda son las zapatillas caras.
Sin embargo, el mundo de Rachel se tambalea cuando su antiguo gran amor reaparece de forma repentina. Creía tener ya su final feliz, que su vida estaba por fin bajo control, pero ¿y si no es así? ¿Y si está a punto de descubrir que, no importa la edad que tengas, todo puede cambiar?
Desde que se cruzó en mi vida "Por los pelos" de esta autora hace ya más de veinte años, he ido leyendo todas las novelas que ha publicado y aunque es cierto, que algún chasco me he llevado, no es en absoluto el caso de esta novela, porque la verdad es que me ha encantado. Volver a reencontrarme con Rachel en la actualidad (2018 en la novela) y con todos los Walsh, padres, hermanas, cuñados, sobrinos... ha sido una gozada.
No puedo decir que recordara con pelos y señales la novela anterior en la que aparecía Rachel (Rachel se va de viaje) porque la leí hace 19 años, pero sí recordaba su personajes y cómo no a Luke, pero en esta novela, Rachel tiene otra pareja Quin, con quien lleva ya casi dos años y a quien conoció en un fin de semana de meditación. Vive en Irlanda y es terapeuta en The Cloisters, donde ella misma recibió ayuda con sus adicciones. Por su lado Luke vive en Denver y también tiene otra pareja, Kallie. Hace ya más de seis años que no se ven, pero Luke está de vuelta en Irlanda porque su madre acaba de morir.
El primer dilema de Rachel es si debería ir o no al funeral de la que un día fue su suegra, sobre todo porque sabe que allí estará Luke y aunque en teoría ya ha superado lo que les pasó, todavía no le ha perdonado que la dejara. Para ella está claro que Luke fue quien rompió la relación, pero quizás ha llegado el tiempo de aclararlo todo de una vez.
Marian Keyes
Fotografía de www.independent.ie
¿Quién mejor que alguien que ha sufrido en sus propias carnes una adicción para ayudar a otros?
Así que acudiremos con ella a The Cloisters y a las sesiones con sus "pacientes". Confesaré que cuando empecé a leer las historias de las personas de las que es terapeuta Rachel, pensé que el libro se podría hacer pesado, que quizás contarnos los problemas de sus "pacientes" iba a servir un poco el relleno al libro, pero... para nada. No solo me ha gustado, sino que lo encuentro esencial para que la propia Rachel vaya comprendiendo algo que en este momento de su vida es muy importante.
Estas sesiones me han parecido duras y a la vez muy emotivas. Cómo todas esas personas adictas a diferentes cosas (analgésicos, drogas, alcohol, apuestas...) se tienen que enfrentar a sus problemas, las fases por las que pasan dentro de The Cloister, como la negación ("en realidad lo mío no es una adicción", "no es tan grave como parece", "no soy adicto/a porque a veces estoy tres días seguidos sin beber, drogarme, jugar... y los adictos no pueden"), lo durísimo que es el cara a cara con sus familias o amigos, escuchándoles hablar sobre el dolor que han soportado viendo como iban haciéndose cada vez más daño y a la vez haciendo daño a quienes les rodeaban, el momento en el que "de repente" se dan cuenta de que sí son adictos... de verdad, todo esto está tratado maravillosamente.
Rachel y Luke han sido dos personajes que me han vuelto a conquistar, sus arrolladoras personalidades, todo lo que llevaban guardado dentro, ese amor que los unía y todo lo que todavía comparten, sin saberlo, han hecho que los vea como personas de carne y hueso y me han emocionado en más de un momento.
Muchas veces cierras un libro que ha rematado con un final feliz y piensas... ¿Y ahora qué? ¿Todo será tan maravilloso como parece?, así que ha sido genial saber sobre Rachel y Luke y también que la vida no es de color de rosa cuando se cierra un libro, a veces a los personajes también les pasan cosas menos gratas como al resto de los mortales y leer sobre ello ha sido genial y el final... 😍😍😍😍.
No digo más.