Siento un gran respeto por Sam Raimi creo que sabe hacer de la industria justo lo que es. Industria de sueños para entretener al personal un rato.
A una precuela como esta no se puede ir con muchas expectativas, porque de entrada no tendría que existir, así que si vas sin grandes esperanzas pasas un buen rato y te comes unas palomitas envuelto en luces de colores que para eso hacen estas cosas.