Pablo Ibar es el único español condenado a muerte en el mundo. De doble nacionalidad, estadounidense y española.
En una sabrosa entrevista que Iraitz Astarloa firma en Deia a primeros de Abril, se nos confiesa Pablo Ibar, condenado a muerte por el Tribunal Supremo de Florida. "Nunca me voy a rendir, nunca voy a tirar la toalla", repite una vez tras otra, minadas un poco ya las fuerzas ante tanta puerta que se cierra y un cúmulo de confusiones que no aclaran su participación en los hechos: la muerte del propietario de una casa en Mirarmar (Florida) y de dos mujeres. La entrada en escena de Peter Raben, el abogado que consiguió la absolución de Joaquín José Martínez, otro español condenado a muerte en el mismo Estado, parece arrojar un poco de esperanza, aunque el tiempo en esas circunstancias pasa lento y nunca se ve el final de la historia. Parece que también le llega un cierto apoyo institucional. “La familia de Pablo Ibar va a tener todo el apoyo del Gobierno”, reconoce la cónsul de España en Miami, Cristina Barrios. “Este caso no es un caso más y no nos vamos a quedar de brazos cruzados”, añade en conversación con "El País". ¿Cuántas personas han muerto porque no contaban con los servicios de un "buen" abogado? Bueno más por lo que cobra, que por lo que logra. El simil es como ese enfermo "famoso y millonario", que renace de un mal del que mueren miles de personas en el mundo, porque no tuvieron dinero para pagarse una operación o un medicamento.
- Declarado culpable por triple asesinato en 1998
- La entrevista hace unos días para Deia
"Recuerdo ese día como si fuera ayer. Uno nunca puede creer que algo como esto te puede pasar. Es como una película. Tu vida cambia completamente. El 1 de abril voy a cumplir 40 años. Entré con 22 años a la cárcel. Ya llevo casi la mitad de mi vida en esta pesadilla. ¡Qué triste!"
"Sí, en el fondo siempre sabía que el mismo tribunal que gastó seis años y medio, tres juicios y millones de dólares para encontrarme culpable no iba a admitir sus errores y darme un nuevo juicio. Pero lo justo es justo y un Gobierno nunca, en mi opinión, puede negar un juicio nuevo cuando un abogado admite que era incompetente y no hizo todo lo que estaba en su poder para defenderme".
"Fue el peor de mi vida. Saber que mi familia y yo tenemos que vivir con este tipo de sentencia y no saber cuándo me van a ejecutar. No sabes qué va a pasar. Pensaba que se había terminado mi vida. Iba a perderlo todo: mi libertad, mi mujer, mi familia. Recuerdo aquello con tristeza y dolor".
- Irregularidades que se citan en el proceso judicial
b) Expertos juristas encuentran en el desarrollo de las investigaciones y el juicio importantes irregularidades procesales (por ejemplo, una rueda de reconocimiento en ausencia de un abogado, etc).
c) Ninguna de las pruebas de ADN, huellas dactilares y análisis de pelos realizadas sobre muestras tomadas en el lugar de los hechos, corresponden con el ADN, huellas dactilares o pelo de Pablo, ello a pesar de que los asesinos permanecen durante 22 minutos en el salón de la casa, durante los cuales son grabados todos sus movimientos, lo cual permite ver donde pueden encontrarse muestras que permitan su identificación.
d) La principal prueba inculpatoria para Pablo es una foto obtenida de una imagen de malísima calidad extraída del video que grabó el crimen y posteriormente manipulada. Esto en España no podría utilizarse en un juicio debido a la manipulación sufrida. El mismo fiscal del caso que durante el juicio utilizó insistentemente esta imagen para convencer al jurado de la culpabilidad de Pablo, en el reportaje de la televisión pública vasca reconoce que él no hubiera sido capaz de reconocer a Pablo por dicha imagen.
Fuentes consultadas: En la página de Amnistía Internacional
Entrevista reciente para Deia
Imagen: ABC