Afirma el Sr. Monedero que van a gobernar este país, supongo que con los votos necesarios para hacerlo, claro. El exmilitante de IU creó una formación con D. Pablo más o menos a medida de la imagen que ofrecen al público y que refleja la fotografía en nuestra entrada de hoy. La alergia a los convencionalismos o las formas no es un signo inequívoco de progreso y la indumentaria ordenadamente desordenada supone una esclavitud a la moda bastante más rígida que la de cualquier profesional o político que utilice traje en su diario quehacer. Tampoco vale como muestra del incoformismo, porque sería quedar en la superficie de un problema bastante más profundo. Los socialistas y populares, mucho más bregados en el asunto este de la imagen, no suelen acudir con una indumentaria formal a los actos de partido, en los que abundan vaqueros y descamisados en las dos formaciones, pero tampoco se asemejan a Evo Morales en los momentos en que el protocolo exige etiqueta. Tal vez nos quieran facilitar estos señores la Cuba de Fidel, la Venezuela de Maduro o la Bolivia de Evo, pero si ese es su paradigma de Estado, no van a contar con mi voto, y espero que tampoco con el de una abrumadora mayoría de españoles con sentido común.