Pacho Alonso y Sus Pachucos

Publicado el 07 abril 2014 por Chumancera


Pascasio Alonso Fajardo. Popularmente conocido como "Pacho Alonso". Cantante, incursionó en el bolero y el ritmo pilón. Su música todavía hace bailar a los cubanos por su ritmo, letra y movimiento.
Nació en La Trocha, barrio Mariana de la Torre, Santiago de Cuba el 22 de agosto de 1928 y murió en La Habana el 27 de agosto de 1982.
Sus padres fueron la puertorriqueña Luisa Fajardo y el cubano Longino Alonso. Pacho fue el antepenúltimo de los dieciséis hijos de este matrimonio. Sus estudios primarios los cursó en la Escuela Pública No. 6. Por esa época integró una pequeña compañía de variedades infantiles, con la que hizo representaciones en fiestas escolares y teatros.
A mediados de la década del cuarenta y finalizado el octavo grado, Pacho Alonso matriculó la carrera de magisterio en la Escuela Normal de Maestros. Durante sus años de estudiante se caracterizó por su forma juvenil, divertido y vivaracho, amante de los estudios, de los deportes y la música. En dicha institución fue integrante de un coro vocal y a su vez practicó varios deportes, entre ellos, el lanzamiento de jabalina, el baloncesto y la pelota [béisbol], los que contribuyeron sin duda a que Pacho contara con un excelente desarrollo corporal y una formación de cultura integral.
Sus hermanos y él se desarrollaron en un hogar musical, la madre tocaba el piano y cantaba; el padre era fotógrafo artístico y todos los hermanos eran músicos aficionados. A los siete años ya hacía presentaciones en una compañía infantil que actuaba en el antiguo teatro Coliseo de Santiago de Cuba.
Debutó en la Cadena Oriental de Radio con el nombre de Oscar Alonso. En 1946 viajó a La Habana y a los 18 años conoció a José Antonio Méndez, quien lo presentó en la conocida Emisora Mil Diez. Sin embargo Pacho regresó a Santiago para concluir sus estudios de magisterio en la Escuela Normal para Maestros de esta ciudad.
En 1946, el pianista, recitador y profesor de inglés, y también santiaguero, Luis Carbonell, laboraba como director artístico de varios programas de aficionados en la Emisora CMKC. Estimulado por éste, Pacho Alonso, que por esa época contaba dieciocho años, se presentó en un programa cantando el bolero Lástima de ti, con el cual obtuvo uno de sus primeros triunfos como cantante.
Poco después visitó la ciudad de La Habana con motivo de una competencia deportiva, ocasión que aprovechó el joven artista para presentarse en la Emisora Mil Diez donde fue estimulado por el compositor José Antonio Méndez y el director de orquesta Bebo Valdés.
En 1948 fue presentado por el animador Gualterio Núñez en la Revista Popular del Aire de la Cadena Oriental de Radio, acompañado por las orquestas de Pancho Portuondo y Chepín-Chovén.
Cuando el notable saxofonista oriental Mariano Macerón regresó de México en 1950 y al año siguiente organizó su propia orquesta de baile, tipo jazz band, integró a la misma a tres de los vocalista más prometedores de ese momento en la ciudad de Santiago: Pacho Alonso, Fernando Álvarez, Alfonso Eliseo (Juan Carón) y más tarde al inolvidable Beny Moré, que por esos años era ya un consagrado por sus grabaciones en México con la famosa Orquesta de Dámaso Pérez Prado.
De 1951 a 1954, Pacho Alonso, junto al maestro Mercerón, realizó una extensa labor como cantante de orquesta, actuando en infinidades de bailes populares, cabarets y en distintos programas en la Cadena Oriental de Radio y en otras emisoras de su ciudad natal.
Desde 1952 en que Pacho Alonso se graduó de maestro y realizó durante un tiempo la ardua y divergente labor de maestro y cantante. Su excelente formación pedagógica y sus grandes condiciones de vocalista, lo hicieron muy querido entre los santiagueros. Su buen carácter, excesivamente jocoso, algunas veces iba en contra de la lógica disciplina que debía imponer como maestro a sus alumnos en el aula. Aunque no le fue fácil dejar de ejercer la profesión maestro de escuela, las diversas actividades nocturnas, en bailes; cabarets, carnavales, ensayos, y sobre todo su fuerte vocación artística, la cual era constantemente estimulada por amigos, admiradores y músicos, se convirtieron al final en razones suficientes para que Pacho se dedicara por entero al canto.
Su primer grupo lo fundó en 1952: Pacho Alonso y sus Modernistas.Desde los primeros momentos, le impregnó a su grupo como característica fundamental, su marcada acentuación, eminentemente santiaguera. Con tal reconocimiento por parte del público bailador, obtuvo sus primeros triunfos en los escenarios de los centros nocturnos como El Copa Club y San Pedro del Mar. Más tarde, fueron contratados con carácter de exclusividad para actuar en la carroza de la Cervecería La Polar, presentándose en distintos carnavales y en otros espectáculos. Es entonces cuando, a pesar de la gran cantidad de orquestas establecidas en la capital, Pacho asume el reto de radicarse en La Habana y cambiar el nombre de su agrupación por Pacho Alonso y sus Bocucos.
A mediados de la década de los cincuenta grabó su primer disco: Cha-Cha-Cha de la Reina, exitosa creación de Enrique Bonne acompañado por la orquesta de Mercerón.
En 1957, Pacho se presentó por primera vez en la televisión durante una semana con su conjunto en el programa «El Show del Mediodía», del canal 6 de CMQ TV. Ese mismo año grabó para los discos GEMA los números titulados Meñoñón (son montuno) y Serenata de Haití. De regreso a su querido Santiago, continuó sus actividades en cabaret y bailes populares, pero ya con la idea fija de darse a conocer nacionalmente desde la capital.
Con esa firma decisión a finales de la década del cincuenta Pacho se radicó en La Habana, y como primer paso en 1958 reestructuró su conjunto con el nombre de Pacho Alonso y sus Bocucos. A su llegada a la capital, estaba consciente que, como joven humilde, para poder triunfar en su medio, no sólo bastaba el talento, sino imponerse a los escollos derivados de un sistema político injusto, como el que imperaba en aquellos momentos en nuestro país.
Después de algunas gestiones infructuosas con gerencia de importantes compañías de grabaciones, Pacho logró un pequeño contrato en el Hotel Deauville donde con un grupo de amigos que confiaban en él pudieron reunir mil pesos y con ellos organizaron una pequeña compañía de grabaciones denominada Producciones NOMO. En un estudio de grabaciones alquilado grabó el son montuno titulado Dame un chance, del oriental Electo Rosell (Chepín) y por la otra cara el bolero de Otilio Portal nombrado Enferma del Alma. Su distribución en las emisoras de radio y vitrolas de los bares se efectuó personalmente y con ayuda de amigos. Enrique Bonne la distribuyó en Oriente. A los pocos meses, la voz de Pacho era escuchada en toda la isla logrando con ello su primer gran éxito en el mercado discográfico y el inicio de una carrera como cantante que se calificaría de vertiginosa y constante ascenso. Ya con su voz de bolerista ritmático sonando en todas las emisoras del país,
En 1959 fue contratado por la RCA Víctor, firma con la cual graba éxitos como "Yo no quiero piedra en mi camino"(Enrique Bonne), y un disco de gran impacto popular, con los boleros "Imágenes", de Frank Domínguez y "Tú no sospechas", de Martha Valdés.
A finales de las décadas del cincuenta y primera mitad del sesenta, el movimiento denominado Feeling quedó plenamente definido. DE 1958 a 1961, el estilo peculiar de Pacho se consolida, dentro de está nueva manera de componer y abordar la canción popular, con sus permanentes presentaciones en pequeños centros nocturnos habaneros como los clubes Le Mans y Scheherazada, donde este vocalista se convirtió en el atractivo central, como fecundo cultivador del bolero «felinoso» . Como todo movimiento cultural e histórico, Pacho no se encontraba aislado. Laboró estrechamente con otros cultivadores del género como los cantantes Elena Bourke, Elsa Balmaceda, Orlando Fierro, Gina León, Dandy Crawford y el Dúo de René y Nelia, que dieron también sus aportes valiosos, y con el acompañamiento de los pianistas Frank Domínguez, Pepe Delgado y Frank Emilio, entre otros no menos notable, Pacho logró una unificación entre el compositor y el intérprete que aportó nuevos elementos emotivos en al canción popular cubana.
Después del Triunfo de la Revolución, se abre para Pacho una etapa llena de nuevos bríos y planes ambiciosos. Los proyectos de su carrera futura estuvieron más estrechamente ligados a su conjunto. Pacho Alonso y sus Bocucos ya tenía bien definido su estilo musical, basado según el propio Pacho, en una mezcla de guapacha y distintos toques de la Tumba Francesa de origen haitiano.
Sus primeros gran éxitos en La Habana fue Imágenes, de Frank Domínguez, y después siguieron otros de Enrique Bonne: A cualquiera se le muere un tío, Se tambalea, ¡Que me digan feo!.
Junto a Bonne trabajó modalidades a partir del Son, como el Pilón, el Simalé, el Upa-upa y otros.
También fue acompañado por las orquestas de Juanito Márquez y Bebo Valdés. Actuó en las emisoras Radio Progreso, CMQ - Televisión y en el Canal 4 de la televisión cubana.
Fue en 1960 que recibe de la RCA Víctor el Disco de Oro, en Medellín, Colombia por su descollante popularidad con La Pachanga. Su primer disco de larga duración salió a principios de 1961. Se titula "Una noche en el Scheherezada con Pacho Alonso" e incluye los ya mencionados "Imágenes" y "Tú no sospechas", además de "Enferma del alma", "Tú no sospechas", "Calor de nido", "Dame un chance", "Tú sabes mucho", "Dímelo con besos", "Se tambalea", "Lo mismo da", "Son cosas que pasan" y "No pienses así".
A partir de 1961, Pacho Alonso y sus Bocucos iniciaron una descollante labor musical actuando en los carnavales en varias provincias, los grandes escenarios de los cabarets Night and Day, Hotel Habana Libre, Tropicana, Nacional, Havana Rivera. Su atractiva figura es solicitada frecuentemente en distintos programas de televisión de aquellos años como «El Show de Arau», «Álbum Phillips», «Jueves de Partagás», «Noche Cubana», «Lunes Musical» y «Casino de la Alegría». En ellos alternó con personalidades artísticas de la envergadura de Beny Moré, Rosita Fornés, Ramón Velóz, Sonia Calero, Alberto Alonso, Luis Carbonell, Trío Matamoros, Cuarteto D’Aida y Bola de Nieve. Grabó su segundo larga duración para la Víctor, donde incluyó a sus Bocucos alternando con las orquestas de Bebo Valdés y la de Juanito Márquez, y donde cantó grandes éxitos de su carrera como la guaracha Que me digan feo, el ritmo guasón A cualquiera se le muere tío, de Enrique Bonne, y el inesperado son montuno de Martha Valdés titulado, Sorpresa de harina con boniato.
En 1961, a Pacho Alonso, a la Orquesta Aragón y a otros cantantes, les fue entregado en el Club La red, de La Habana, el Disco de Oro de Simpatía, por la RCA Víctor por ser uno de los discos de mayor venta del año 1960 en Cuba y en el extranjero.
A partir de 1962, Pacho Alonso tuvo la oportunidad de representar el país más allá de nuestras fronteras. Con su conjunto dio a conocer la obra y ritmos de nuestros compositores más representativos en países de Europa socialista y capitalista. En la exclusiva sala de conciertos del famoso Conservatorio Chaikowski, de Moscú, ante un público compuesto de personalidades musicales y políticas, con la actuación de Pacho y sus Bocucos se produjo por primera vez en la historia de dicha selecta sala la presentación de un grupo de música popular. Ese mismo año representaron a Cuba en el Festival del periódico L’HUmanité , en Francia, y un año más tarde en el Festival de Radio Praga, Checoslovaquia, con el mismo éxito.
En 1964, compositor Enrique Bonne, gran amigo de Pacho, le propone a este la incorporación de su nuevo ritmo denominado Pilón. Esta modalidad, con antecedentes en el Órgano oriental, toma su nombre del rústico instrumento donde los campesinos molían el café. El Pilón significó la cumbre del éxito del dueto Alonso-Bonne. Desde los primeros momentos el ritmo prendió entre los integrantes de Los Bocucos, en especial entre los músicos, Manuel Cobas Quenque (tumbadora), Miguel Ángel Albear (paila), Ibrahín Ferrer (güiro y cantante) y Roberto Correa (trompeta y clave), los cuales con sus toques y sugerencias acabaron de perfilar el Ritmo Pilón, junto a los valiosísimos aportes en el campo y el baile creados por el propio Pacho Alonso Ninguna de las variantes posteriormente desarrolladas por ellos, como el Simalé y el UPA UPA,aunque fueron muy populares, lograron ese nivel de popularidad.
En 1967 Pacho decide formar un nuevo grupo llamado Pacho Alonso y sus Pachucos, el cual se caracterizaba por una sonoridad tímbrica más contemporánea al que Pacho incorporó un repertorio nuevo. Con esta agrupación, el 19 de agosto de ese mismo año ofreció un recital en el Palacio de Bellas Artes de La Habana; allí el cantante hizo gala de su versatilidad cantando desde un son montuno como El guayabero de Faustino Orama, hasta el nuevo estilo de bolero muy de moda por aquellos años como los titulados. Esta tarde vi llover y !No!, del mexicano Armando Manzanero; otras como Persistiré, y Como pienso en Ti, de los cubanos Rubén Rodríguez y Roberto Puente, que una vez grabados llegaron a ser nuevos éxitos de Pacho en todas las emisoras del país. Con Los Pachucos hizo giras por la Unión Soviética, Checoslovaquia, Italia, Francia (actuó en el Olympia de París), España y Panamá, donde tuvo gran acogida como bolerista y sonero.
En 1969, Pacho y sus músicos fueron invitados por el mes de junio a la Feria de Barcelona, en España, en la cual por su sobresaliente labor artística y aceptación popular durante todos sus festejos le fue otorgada la Medalla de Oro con el compromiso de volver a Barcelona el siguiente año. En las dos oportunidades en que Pacho y su grupo visitaron la Feria Internacional de Muestras de Barcelona, aparte de sus presentaciones en el Pabellón Cubano fue contratado para cantar en otros escenarios como el Club Larraine, Restaurante Tres Molinos, Night Club Tropicana y otros. Actuaron junto a agrupaciones españolas muy conocidas por aquella época en nuestro país como los nombrados, La Formula V, Los Javaloyas, Los Diablos, Los Payos y cantantes famosos como Rafael, el argentino Luis Aguilé y el mexicano Armando Manzanero. Ofreció recitales por la televisión y la radio, y con el Simalé, nuevo ritmo incorporado por Pacho a su conjunto, con el cual hubo tanta exaltación por parte de los bailarines españoles que motivó que dejaran grabado en España, para la firma Movieplay, un larga duración dedicado totalmente a esta modalidad musical cubana.
En 1970, Pacho Alonso junto a los más destacados de nuestros deportistas fue invitado a los Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en Panamá. Por su participación notable le fue otorgada la Medalla del Pabellón panameño y a su vez, todos nuestros atletas se sintieron estimulados por su música y apoyados por su dinámica que recordaba su juventud y sus buenos tiempos de deportista.
Dos años más tarde (1972) integró el espectáculo Directo de Cuba, en unión de la cancionero Ela Calvo, Los Papines, y un grupo de bailarinas, los cuales llevaron un ejemplo genuino de música cubana por países por países como la Unión Soviética [hoy Rusia], Bulgaria, Rumanía, Polonia, República Democrática Alemana [hoy está unificada a la República Federal de Alemania] y Checoslovaquia [hoy dividida en República Checa y República Eslovaca o Eslovaquia]. A su regreso, fueron notorias sus actuaciones en varias carrozas durante los paseos en los carnavales de esos años y donde dio a conocer el Upa upa, otro nuevo ritmo, el cual como siempre, fue recibido con satisfacción por nuestros bailadores.

Durante la década del setenta, Pacho viajó por varios países de América y Europa. A finales de esa década incorporó a la orquesta a su hijo Pachito, muy joven pero ya destacado pianista y arreglista. Pacho terminó por entregarle la conducción de la banda. Bajo la dirección de su hijo se grabaron temas como "Conocí a Pedro el Cojo", "En Guayabero" y "Algo Contigo". También exhibió su maravillosa voz en numerosos boleros.
En 1978, Pacho Alonso y sus Pachuchos viajaron de nuevo a España, donde se presentaron con el éxito acostumbrado en Zaragoza, Barcelona, La Coruña, Madrid, Aragón, Huelva y Llogregat. De regreso a Cuba, centralizó el show a lo Pacho Alonso, en el Cabaret Copa Room, del Hotel Havana Rivera, y participó ese año en el Festival del Son. Ya por esa época, su hijo Longino (Pachito) destacado pianista y orquestador [Director de Orquesta], se había hecho cargo de la dirección musical de su conjunto. Las innovaciones, arreglos e ideas renovadoras introducidas en su conjunto por su joven hijo, de alguna manera favorecieron la línea de trabajo del propio Pacho. Con su hijo grabó varios larga duración. Entre ellos dos exclusivos, donde Pacho regresó al bolero y a la canción y donde se mostró en plena facultades vocales e interpretativas.
Un año antes de fallecer de forma repentina, en la Ciudad de La Habana, un 28 de agosto de 1982, el estado cubano le había otorgado a Pacho Alonso laMedalla por la Cultura Nacional. De ese modo se le reconoció a nombre de su pueblo sus grandes aportes a la música popular cubana y a su alegría de vivir._ecured
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Pacho Alonso y Sus Pachucos (1971)
Temas:
01.Divertido Simalé (Pacho Alonso)
02.Tanto Como Ayer (Tomás Jesús González)
03.Fea La Jicotea (Bonne - Alonso - Pifferrer)
04.Prefiero Soñar (Tania Castellanos)
05.Dame La Mano Y Caminemos (Enrique Bonne)
06.Portobelo (Carlos Eleta)
07.Simalé A Lo Bonne (Enrique Bonne)
08.En Los Días Invernales (Tomás Jesús González)
09.Chiquita Bombón (Emilio Carnero)
10.Panameña (Folklore Panameño)
11.Te Voy A Planchar (Germán Pifferrer - G. Bellón)
12.Cuando Llegue El Tren (Enrique Bonne)



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