Incluso se creó un grupo de Facebook para apoyar al periodista deportivo que, poco después sería la voz de Telecinco en el mundial de Sudáfrica. Pero, ¿cuál fue el motivo del despido de González de la Ser?
Según algunas fuentes fue por un comentario desafortunado de un colaborador suyo en la final de la Superbowl. Y es que parece ser que Hevia se mofó de algunos de los anunciantes de Carrusel deportivo (a saber, las encimeras Silestone y los tractores Maxi Ferguson) y al día siguiente la dirección de la Ser le apartó de empleo y sueldo.
(ver emotiva carta abierta de Paco González agradeciendo a los oyentes su fidelidad e instanto a Lama -Mr.X- a que rescindiera por la Ser y fichara por la Cope)
Ahora están todos en la Cope con el renovado Tiempo de Juego y mes a mes le están quitando oyentes a Carrusel Deportivo (el programa deportivo de la Ser). Están llevando a cabo el programa que tenían estructurado en la Ser, pero bajo las ondas de la Cope.
El Grupo Prisa han demandado al equipo deportivo de la Cope por plagiar el programa, algunas coletillas o incluso la señal de morse tan típica cuando se marca un gol... pero lo más curioso no es quién se llevará el gato al agua, ni qué emisora elegirán los oyentes los domingos para escuchar los partidos de sus equipos favoritos (en mi caso, a la Cope desde el primer minuto, sin dudarlo). Lo que llama la atención es la fidelidad de un grupo de trabajadores hacia una persona. Puedo entender que alguno haya seguido el camino iniciado por Paco González, por cuestión meramente profesional o incluso personal... pero... es que han abandonado la Ser más de vente personas!!!.
Yo jamás he visto una cosa así en un entorno profesional, y a mi entender demuestra que el despido del asturiano debió ser algo suficientemente injusto y polémico como para llevar el apoyo de otros profesionales que llegan a abandonar su trabajo para seguir a tan emblemático periodista. Creo que es un ejemplo de fidelidad laboral sin precedentes.
Evidentemente todo estará calculado y por detrás hay ciertas dosis de honorabilidad, ánimo de revancha y dinero, pero el movimiento no es sólo de periodistas o locutores de mayor o menor prestigio. También los oyentes se han mantenido fieles a un estilo de periodismo deportivo. A unas voces que llevamos escuchando hace más de veinte años, y los datos del EGM (estudio general de medios) así lo demuestran. Los datos de la Cope son demoledores. En apenas cuatro meses pasan de 388.000 oyentes a 890.000, y recortan diferencias (de por si enormes) con Carrusel Deportivo.
Sea como fuere, da gusto escuchar un programa de radio en el que parece que un grupo de amigos están pasando el rato de la mejor forma que saben. Divirtiéndose y haciendo disfrutar a cientos de miles (pronto millones) de oyentes amantes del deporte narrado de forma distinta.
Olé tus pelotas Paco... ¡envidia de equipo!