Este incidente ha causado gran consternación entre las familias, quienes consideran que se ha vulnerado un momento crucial e irrepetible en la vida de sus hijos. Además, señalan que no es la primera vez que la directora muestra comportamientos prepotentes y acusaciones de hostigamiento y acoso se han acumulado en su contra a lo largo de los años.
Los padres también mencionaron que a pesar de las quejas formales y recomendaciones emitidas por organismos de derechos humanos dirigidas a la dirección de la escuela, las autoridades competentes no han tomado medidas efectivas. Esta situación ha generado un ambiente de tensión y frustración, lejos del entorno educativo positivo y de celebración que se esperaría para una ceremonia de graduación.
El comunicado culmina con un llamado a las autoridades educativas a intervenir y asegurar que los derechos de los estudiantes y padres sean respetados, restaurando un clima de respeto y dignidad en la institución.