Soy un padre igualitario es decir soy un padre normal. Visto a mis hijos, les hago de comer, les leo cuentos, los llevo a la cama. Vamos juntos al parque, los baño si toca. Soy padre todo el año, todos los días a todas horas. No ayudo a mi mujer, ¡no! hacemos los dos, estamos los dos, somos los dos. No hago ni menos, ni más. Somos y estamos y queremos ser y estar.
Me siento feliz de que mi hija también quiera dormir conmigo. Me siento muy bien cuando mi hijo me dice que me necesita que está enfermo. Me gusta prepararle la merienda para el cole y meterle alguna sorpresa. No quiero dejar de hacer. Quiero reir con mi hija cuando le cambio el pañal.
Soy un padre que se equivoca pero soy uno que quiere y por lo tanto disfruto.
Os invitamos a disfrutar de vuestros hijos todo lo que podáis y más.