pájaros en la cabeza, mariposas en el estómago.

Publicado el 28 octubre 2014 por Catadora De Sabores @hoynoteacostara
Conclusiones tras cervezas en conciertos de cantautores, y cafés en estaciones de tren.




 A ti que estas en alguna parte entre mi cabeza y mis rodillas.
Que a veces te vuelves obsesión dentro de mi sesera, y no me dejas concentrarme en otra cosa que no sea la tecnología, para entender y comprender cada movimiento tuyo en el tablero. Que me transformas en detective privado por cuenta propia para conocerte sin verte ni interactuar contigo. Condicionando mi visión de ti por unas fotos, unas publicaciones o una experiencia laboral.
A ti, que a través de mis ojos, entras y sales, como información enviada sin filtro y que se transforma en información confidencial y en respuesta, se envía a través de mi boca o mis dedos, para llegar en forma de mensaje o de foto. A ti. O eso creo.
Que dueles a menudo, por estar demasiado, por no estar el tiempo suficiente. Porque sea del modo que sea, no vaa ser del modo en que yo quería, porque tenemos que quejarnos, y porque siempre queremos otra cosa diferente a lo que nos dan.
Que de pronto te conviertes en pensamientos, canción, olor, acción, lugar, y alguna que otra cara a la que no te pareces. Porque el caso es que estas, aunque no estés. Aunque te vea todos los días, o haga algo más de dos semanas que no te cruzas por mi camino.
A ti, que te escondes en mi estómago en forma de mariposa, o de avispa, luchando por salir de entre mis entrañas, creando un nudo complicado que no puedo deshacer por mí misma pero que se parece a una colmena, con su forma geométrica y perfecta de taponar mi estómago.
Que de pronto te transformas en debilidad, haciendo doblar mis rodiilas, o en fortaleza, capaz de ir directa a ti, y hablarte, y mirarte y quizás de alguna manera, sentirte.
Porque los que fuimos valientes en el siglo XX, ahora somos los cobardes del siglo XXI. Porque nos costó demasiado sobrevivir a los suicidios fallidos cometidos, por favor, no nos lo tengan en cuenta.
Y trátennos con cariño.