Pan de leche

Por Puchereta

Que buenos y que juego dan estos panecillos. Tanto para desayunar o merendar, con relleno dulce o salado, para los almuerzos o para servir una cena fría, una variada bandeja de panecillos con rellenos diferentes,  puede ser salmón y queso fresco, carnes frías, fiambres, y cualquier otra combinación que se os ocurra, lo dejo a vuestra elección, quedan estupendos para  juntar a los  amigos,  para una merienda infantil o para lo que os apetezca.

Publicare en breve mis Pepitos de leche, así que estar atentos.
La receta es del libro PAN de Xavier Barriga, el maestro, infalible, yo los hago y los congelo para la semana, aunque ahora le he dado un descanso al horno, no quiero morir derretida con estos calores.
INGREDIENTES
500 g de harina de fuerza
12 g de sal
40 g de azúcar
25 g de leche en polvo
20 g de miel
1 huevo
250 ml de leche
50 g de mantequilla
25 g de levadura fresca
Para pintar
1 huevo
PREPARACIÓN
Dejaremos la mantequilla  30 minutos fuera de la nevera cortada en trocitos.
Si tenemos panificadora pondremos los ingredientes en la cubeta, primero líquidos y después sólidos seleccionamos el programa masa, 20 minutos.

A mano ponemos los ingredientes en un recipiente amplio y mezclamos, sacamos sobre la mesa de trabajo y trabajamos hasta conseguir una masa lisa y manejable.
Cortamos porciones de 80 g  le damos forma redonda, dejamos reposar 30 minutos tapadas con un paño húmedo.
Transcurridos los 30 minutos de reposo le damos forma alargada y las ponemos en la bandeja de horno, pintamos con el huevo ligeramente batido y mezclado con un poquito de sal.

Les hacemos unos cortes casi laterales y bastante profundos y dejamos fermentar durante 90 minutos.
Precalentamos el horno  250º generando vapor, para ello ponemos un recipiente con agua en el fondo del horno y cuando vayamos a meter la bandeja espolvoreamos con agua para generar más vapor.
Cuando los panecillos hayan doblado su volumen, pintamos de nuevo con huevo y horneamos a 210-230º durante unos 12 minutos, vigilar no  se os doren en exceso.
Dejar enfriar sobre una rejilla, una vez fríos se pueden congelar.
FELIZ FIN DE SEMANA