Hacía mucho tiempo que no hacía pan, y no será porque no me he acordado, era más pereza que otra cosa, así que en cuanto ha llegado un poco de fresquito me he animado a hacer este pan de leche.
Si os soy sincera, no me ha salido como esperaba, pero de sabor está tan bueno que no he podido evitar el enseñároslo. Se trata de un pan que es dulce, pero que se puede combinar con alimentos salados (un sandwich de jamón york, resulta un bocado espectacular), y un poco tostado con mermelada... no os digo nada de como está, mejor que lo probéis.
Ingredientes- 500 gramos de harina de fuerza. - 20 gramos de levadura (de panadero).- 300 ml de leche tibia.- 1 cucharadita de postre de azúcar glas.-1 pizca de sal.
Disolver la levadura en la leche tibia y reservar.
Mezclar la harina con la sal y el azúcar en un bol grande. Hacer un agujero en el centro y verter la leche tibia con la levadura, mezclar hasta que se haga una masa pegajosa. Pasar la mezcla a una mesa de trabajo previamente enharinada y amasar durante diez minutos más o menos, se debe obtener una masa homogénea elástica. Poner nuestra masa en un recipiente limpio, tapar con un paño de cocina y dejar reposar unos 45 minutos, hasta que doble su tamaño.
Transcurrido el tiempo, volver a amasar nuestra masa, para que se desinfle un poco, y volver a ponerla en el recipiente, tapar y dejar reposar otros 45 minutos. Untar un molde rectangular con aceite y transcurrido el tiempo, dar forma de S a nuestra masa y colocar dentro del molde, tapar con un paño de cocina y dejar reposar durante más o menos una hora.
Precalentar el horno a 200º, y llevar nuestro pan (que habremos untado previamente con un poco de leche). Hornear durante 45 minutos.
Espero que os haya gustado.