Pan exprés (para debutantes)

Por Gutamama @Gutamama
Qué poco nos gustan los cambios ¿verdad?
Hace tiempo leí un libro que os recomiendo, del Dr. Mario Alonso Puig , titulado "Vivir es un asunto urgente" ( me parece una lectura obligatoria, de esos que guardas en la mesita y necesitas releer de vez en cuando) en el que explica, entre otras muchas cosas, por qué a los humanos nos gusta tanto situarnos en nuestra "zona de comfort", donde no hay incertidumbre y nosotros llevamos el control,  y por qué nos aterra el hecho de tener que salir de esa zona segura cuando tenemos que afrontar cambios o nuevos retos.

Salir de nuestra zona de seguridad, o de comfort, como dice el Dr. Alonso Puig, nos obliga a esforzarnos, a desarrollar nuevas capacidades y actitudes, a explorar nuestros límites y a adaptarnos a las nuevas circunstancias. Pero además el autor nos revela las reacciones físicas que se producen en nuestro cerebro y en nuestro cuerpo: ante una situación de estrés el cerebro reacciona desencadenando los procesos químicos
que le permiten segregar ciertas sustancias y hormonas en nuestro riego sanguíneo, y éstas nos producen la sensación de miedo y nos hacen reaccionar de varias formas: nos pueden paralizar, nos provocan la necesidad de huír, o la necesidad de luchar. También nos habla sobre los procesos físicos y químicos beneficiosos que se desarrollan en nuestro cuerpo cuando nuestro estado mental es positivo y alegre, influyendo en nuestra propia salud. ¿Sabíais que estar de mal humor produce un descenso en nuestro sistema inmunológico? 

Por todo esto, es una lectura que os recomiendo, porque además de entender por qué nos comportamos así, nos da unas pautas para manejar nuestros "miedos" para enfrentarnos al estrés diario y a las situaciones difíciles, para motivarnos, para que pensemos en nuestra felicidad.  Nuestro ritmo de vida es urgente pero Mario Alonso Puig nos recuerda (de ahí el título) que VIVIR es lo urgente, no lo demás. 
¿Y por qué os cuento esto? Porque hoy os traigo un reto: hacer vuestro propio pan. A muchos de vosotr@s ni se os habrá pasado por la cabeza... Vuestra "zona de comfort" panarra es la panadería, al igual que la mía. Pero os propongo que un día de éstos, cuando tengáis un ratito, os animéis a salir de esa zona de comfort y os propongáis disfrutar de hacer vuestro propio pan. Os aseguro que la receta es muy fácil, y el resultado os hará muy felices! El placer de amasar ese pan, el olor por toda la casa cuando se hornea, el sonido del crujir de su corteza, y lo que os lo van a agradecer vuestros comensales; por todo ello, merece la pena dedicar 20 minutitos a hacer la masa, y 40 minutitos de horneado, no creéis? Hay placeres en la vida que son difíciles de explicar, y, uno de ellos, es hacer tu propio pan.
A l@s que haya convencido, que me sigan a la cocina!! ;D

PAN EXPRÉS

Ingredientes:
  • 310 gr. de harina de fuerza 
  • 175 cl. de agua
  • 20 gr. de aceite de oliva (aprox. 4 cucharadas soperas)
  • 15 gr. de levadura fresca de panadería o 1 sobre de levadura liofilizada para pan
  • 1 cucharadita de sal
  • opcional: semillas, pipas, frutos secos...

Nota: para que el horneado sea tan rápido, es imprescindible disponer de un recipiente con tapa, tipo Pyrex, como éste, de tamaño mediano. Es una inversión asequible a la que sacaréis un gran partido.

Elaboración:
  1. En un bol mezclamos el agua con el aceite de oliva, y lo ponemos unos 10 segundos en el microondas para templarlo. 
  2. A continuación añadimos a la mezcla el sobre de levadura para pan y removemos bien hasta que esté disuelto. Si usamos levadura fresca, la desmenuzamos y la añadimos a la mezcla de agua y aceite, removiendo bien hasta que esté disuelta.
  3. En otro bol más amplio ponemos la harina y le añadimos la mezcla anterior (agua, aceite y levadura). Si queremos añadir unas semillas o pipas en la masa, lo hacemos en este momento.
  4. Mezclamos bien con la ayuda de un cucharón de madera o ya que estamos, con nuestras propias manos, ya que poco a poco la masa se irá haciendo homogénea y se irá despegando de las manos sin problema.
  5. Cuando tengamos ya una masa que se pueda manejar, la volcamos sobre una superficie enharinada (y bien limpia, no seáis cochinotes) y comenzamos a amasar durante unos minutos, hasta que veamos que está todo bien mezclado.
  6. A continuación, ponemos unas gotas de aceite en nuestro recipiente de horno, y con ayuda de una servilleta lo engrasamos bien por el fondo y los laterales. 
  7. Ponemos nuestra masa, con forma de bola, en el recipiente, y con un cuchillo bien afilado (como el cuchillo jamonero, por ejemplo) le hacemos un corte en la parte superior en forma de cruz. 
  8. Untamos la superfície del pan con un poco de aceite con la ayuda de una brocha o con los dedos.
  9. Opcionalmente, si nos gusta el toque rústico, espolvoreamos el pan con un poquito de harina en la parte superior o podemos optar por ponerle unas semillas de sésamo sobre la corteza... 
  10. Ponemos la tapa del recipiente e introducimos en el horno APAGADO. Ahora, encendemos el horno y lo ponemos a 220º durante 40 minutos.
Cuando lo saquéis, no os lo vais a creer. 
A tener en cuenta: 
  • La harina de fuerza se puede encontrar en cualquier tienda o supermercado, es un producto muy utilizado!
  • La levadura fresca se vende en supermercados aunque también en muchas panaderías artesanas la venden. La levadura para pan de sobre (ojo, no confundir con los polvos de hornear usados en los bizcochos o magdalenas, tiene que poner en el envase, levadura "de panadería" o para "pan") la podéis encontrar también en supermercados y la mayoría de tiendas de alimentación.
  • El aceite de oliva, cuanto más bueno esté, mejor estará el pan. Yo utilizo siempre virgen extra.
  • Se pueden hacer muchas variedades de este pan, añadiendo por ejemplo, semillas de lino, de amapola, de sésamo, nueces picadas y, ¿por qué no? ajo y perejil! 
Seguro que no será la única vez que lo hagáis, porque hacer pan casero, engancha! Esta receta no precisa de tiempos de levado porque el truco está en que al introducir el pan en el horno apagado, éste comienza a levar, y el calor progresivo acelera el levado. Por supuesto, si deseáis experimentar un poco más con el mundo del pan, existen múltiples recetas con levados, masas madre y demás que iremos compartiendo con vosotros en próximos post.
Esperamos vuestros comentarios, y si tenéis cualquier consulta o queréis enviarnos vuestra propia versión de esta receta, fotografías o mejoras, podéis hacerlo aquí, nos encantará recibirlas y publicarlas en nuestra sección "Vuestras Fotos"!
Si queréis recibir nuestras recetas "Guta Mamá" en vuestro email, sólo tenéis que suscribiros aquí.Gracias por vuestro tiempo y hasta la próxima receta!