Pánico al test de embarazo negativo

Por Clara Ingeniera @mamaingeniera

La mayoría de buscadoras nos hemos sentido muy fértiles cuando empezamos la búsqueda incansable de un embarazo, y es por ello que, echando mano de toda la información que tiene internet para nosotras, hemos hecho compras masivas de tests de embarazo baratos.

Supongo que no seré la única que, en el primer mes de búsqueda, se hizo tests de embarazo desde dos o tres días antes de que tuviera que llegar la menstruación. Recuerdo como, presos de la emoción, nos levantábamos un día cualquiera, y corriendo, me hacía un test, que por supuesto, daba negativo.

Creo que este fulgor duró unos 3 o 4 meses, en los que hice 2 o 3 compras de tests de embarazo. Al final, ver los tests negativos, empezaba a doler y decidimos que el último test que quedaba, lo guardaríamos para cuando fuera segurísimo que si. Sería el test de la victoria.

Ese test ha estado esperando su momento desde hace más de medio año. Y echando la vista atrás, me sorprendo a mi misma de cómo he podido aguantar todo este tiempo, sin hacerme un test antes de hora. Y es que el dolor que proporciona un test blanco nuclear es superior a la intriga y a la espera de que baje la regla. Sobre todo, cuando ni siquiera hay psicosíntomas. Desarrollé lo que llamo “pánico al blanco nuclear“, y suena tan catastrófico como resulta ser.

Cómo bien sabéis, ayer tuve un momento de crisis existencial y me hice ese último test de embarazo que me estaba guardando para mi gran momento. Fue negativo, aunque esta vez no dolió como las otras. Supongo que el hecho de que yo, de algún modo, ya supiese que no estaba embarazada, ayudó bastante, y por otro lado, el tema del trabajo me estaba matando en ese momento y eclipsó el dolor de que mi primer ciclo de Omifín no haya funcionado.

Ahora me encuentro de manos vacías. No hay tests de embarazo en mi cajón y tengo un porrón de tests de ovulación que no puedo utilizar, porque si me inyectan Gonadotropina Corionica, dan falsos positivos. Así que también los puedo utilizar para tantear un posible embarazo. Más adelante hablaré de esta teoría y de su base científica, que la tiene.

A la espera de que me venga la regla, ya tengo mi cita con la ginecóloga este jueves. Ojalá el folículo residual del mes pasado ya no esté, porque si sigue ahí, tendremos que suspender el tratamiento con Omifín.

¿Me ayudáis a proyectar que el dichoso folículo haya desaparecido? Enviadme todas vuestras fuerzas, por favor.