Pánico en Colonia

Publicado el 09 enero 2016 por Liberal

Ha empezado el Año Nuevo con fuerza. El establecimiento político-mediático han tenido que recurrir al modo propaganda para seguir teniendo pretextos de seguir en el poder. Es imposible ya ver o escuchar alguna notícia últimamente que no pida más leyes duras, la deportación de “extranjeros criminales” y más vigilancia. La verdad es que últimamente me resulta casi nauseabundo leer la prensa occidental, porque no es más que pedir leyes y leyes y leyes de todo tipo para apretarnos las tuercas. Prohibiciones y pijadas de todo tipo que nada tienen que ver con la política real de los pueblos y sí todo que ver con la manifiesta incompetencia notoria de nuestros patéticos gobernantes odiosos, mentirosos y corruptos.

Después de abrir las fronteras alemanas de par en par, ahora sale Angela Merkel a pedir reforzar las leyes para expulsar a “criminales refugiados”. Esta última campaña propagandista ha puesto todos los demás temas mucho más importantes en la cola de las notícias, si es que acaso se mencionan alguna vez. A estas alturas, todos sabemos – no, perdón. Todos hemos leído notícias sobre una supuesta “conmoción en Colonia” por una presunta oleada de agresiones sexuales cometidas, supuestamente, por “inmigrantes musulmanes”. Al parecer, hordas de varones totalmente borrachos atacaron, robaron y acosaron a mujeres en la estación de trenes de Colonia y sus alrededores durante la pasada Nochevieja. Es llamativo que a pesar del bombardeo mediático sobre estos sucesos, poco sabemos realmente después de 9 días. A pesar de la falta de información (el lunes la policía germánica dará más detalles…o eso dicen), está claro que es una campaña calculada y organizada perfectamente.

Sólo sabemos una cosa absolutamente: Unas mil personas se congregaron ese día en la Plaza entre la estación principal y la catedral de Colonia para celebrar el Año Nuevo. Cuando algunos de los que estaban en ese grupo empezaron a lanzar petardos y cohetes contra la multitud, la policía cerró y desalojó la plaza media hora antes de la medianoche, para evitar, según ellos el “pánico masivo”. Poco antes de la una de la madrugada, una vez más abrieron la estación al público. En este mismo momento, un número indeterminado de mujeres empezaron a denunciar a la policía actos de robo. Según las fuerzas policiales de Alemania, algunas también denunciaron agresiones sexuales. La policía envió más de 150 policías a la plaza, acompañando a las víctimas a la estación. Dentro de la estación, había 70 policías federales presentes. Al día siguiente, esa misma policía dijo que no habían visto nada “inusual” y que la situación era “relajada”. En las redes sociales, de hecho, los sucesos de Colonia ni tan siquiera se mencionaron como problema. Hubo alguna que otra denuncia de supuestas violaciones sexuales o acoso en la prensa local de Colonia.

2 de enero, 2016: La policía organiza un equipo investigador para averiguar sobre los incidentes. Según la prensa local, más de 30 mujeres se dieron a conocer como víctimas y los investigadores suponen que hay más de 40 agresores. Al principio, hubo descripciones tales como que eran hombres “de apariencia norteafricana o musulmana”. La policía sospechaba que se trata de varones conocidos para ellos — los típicos ladronzuelos y carteristas que tanto abundan en toda Europa.

Los sucesos en Colonia solo llegaron a la prensa nacional después de cuatro días, cuando la alcaldesa Henriette Reker y el Jefe de la Policía Wolfgang Albers dieron una rueda de prensa. Desde entonces, dominan las portadas de los periódicos europeos. Las denuncias aumentaron a 121, la mayoría por acoso sexual. 50 denuncias también hablan de robo. En solo DOS CASOS, se denuncia violación directa (AÚN BAJO INVESTIGACIÓN) así que realmente no sabemos nada. La policía ha identificado a 16 sospechosos mirando las grabaciones de las cámaras de seguridad. La mayoría no son conocidos a la policía por su nombre. No ha habido, hasta ahora, NINGUNA DETENCIÓN.

Con esta información tan escasa, parece que simplemente se confirma algo que ya todos sabemos: la estación y la zona esa en Colonia es famosa por sus carteristas…casi como si se tratara de Atocha y la zona centro de Madrid. Si a eso le sumamos un consumo de alcohol masivo y la presencia de una multitud inmensa y sin espacio para moverse, tenemos un cóctel explosivo. Muchas mujeres informaron que fueron toqueteadas en todas partes por hombres y sin su consentimiento.

Eso es realmente asqueroso y repugnante pero NADA NUEVO en ALEMANIA. En todos los eventos donde hay consumo de alcohol masivo en ese país, se denuncian hechos similares. En el famoso “Oktoberfest” de Baviera, a menudo ocurren sucesos idénticos si bien es cierto que no de manera tan concentrada. Uno de los problemas más graves que sufre Alemania es, precisamente, el ACOSO SEXUAL. Y, la MAYORIA DE LOS AGRESORES O ACOSADORES SON ALEMANES DE PURA CEPA! Aquí tienen un excelente artículo informativo (en inglés) al respecto y del ¡¡2013!! MUCHO ANTES de estos sucesos. Aquí tenéis otro artículo sobre el aumento de agresiones sexuales en Alemania. Y aquí otro sobre el peligro de las bebidas drogadas en el “Oktoberfest”. Podéis estar segurísimos que al Oktoberfest no van varones musulmanes…lo más probable es que si eres chica violada o acosada en ese repugnante festival hedonista, tu acosador sea uno de esos rubitos de ojos azules que algunos adulan en España, en su complejo de inferioridad irremediable.

Los sucesos de Colonia tienen mucho que ver con la brutal crisis social que viven los países germánicos y anglosajones. No tienen sociedad realmente, ni comunidad. EN NADA tiene esto que ver con el millón de refugiados admitidos por las autoridades alemanas. La mayoría de personas detestan la violación.

Me preocupa ver como los políticos alemanes están usando estos sucesos para aumentar los poderes de su estado. El Ministro de Justicia federal Heiko Maas, por ejemplo, miembro de un supuesto partido progresista (Social Democratic Party) habló de una “nueva dimensión de crimen organizado”. Sin aportar ninguna prueba que los sucesos en Colonia formaban parte de un plan organizado, dijo “cuando tenemos una horda junta y deshinhibida, tenemos una violación temporal de la civilización”. La verdad es que eso sí que nos debería dar pánico, porque esas mismas palabras se han utilizado en Alemania en relación con el HOLOCAUSTO. El Secretario General de la “Unión Social Cristiana”, Andreas Scheuer, acusó a “jóvenes inmigrantes” como responsables de los ataques en Colonia. El Ministro del Interior en la zona norte Renania-Westfalia se llama Ralf Jager…y de hecho es supuestamente también “de izquierdas” (pero como ya sabemos, tipo PSOE)…solo en nombre. Se expresó como si fuera un líder de un partido neonazi como Pegida. “No aceptamos”, dijo, “que grupos de varones norteafricanos se organicen para humilles a mujeres indefensas con ataques sexuales tan descarados”. En ambas declaraciones vemos ecos de los Nazis alemanes cuando hablaban de “mujeres alemanas desacradas por extranjeros subhumanos”.

En Twitter, la ex ministra de “familia”, Kristina Schroder, de derechas, dijo que “las normas masculinas en la cultura musulmana que legitiman la violencia contra las mujeres tienen que ser refutadas y antes eso era un tabú”, espetó. El ministro del Interior Tomás de Maiziere dijo que “aunque no existe una sospecha general de que los acosadores son refugiados”, dijo unos segundos después que “si se comprueba que sí son norteafricanos, no podemos simplemente ignorar ese hecho”.

La campaña de difamación contra los “norteafricanos” o “la cultura musulmanes” o “varones norteaafricanos e inmigrantes” inevitablemente también conlleva pedir más policía, mas “leyes duras” y la expulsión de refugiados. Hoy sábado, el partido derechista CDU quiere tener una conferencia en Mainz para aprobar controles de identificación indiscriminados a determinadas personas así como mas leyes “cañeras”.

Los sucesos de Colonia son el pretexto, no la razón, para pedir más poderes al Estado alemán. Ya hace tiempo que medios claves en Alemania como “Die Zeit” ya pedían un estado fuerte. Esto está más bien relacionado con la vuelta de Alemania a su tradicional militarismo y su política exterior agresiva. Las operaciones bélicas en Afganistán, Siria y Malí, así como el aumento imparable de la DESIGUALDAD SOCIAL están provocando una creciente resistencia en ese país. Contra esa resistencia real quieren combatir los que piden un estado alemán más fuerte. A pesar de la intensa propaganda histérica de la derecha, NO ha sido posible romper esa gran oposición entre capas amplias de la población alemana contra LA GUERRA y la simpatía popular por los refugiados. Ahora están intentando explotar el tema de la violencia contra las mujeres para intentar ver si pueden cambiar la actitud del pueblo alemán.

Lo primero que me vino a la mente cuando leí sobre esos sucesos y comprobé que pasa mucho en Alemania es lo siguiente: ¿por qué pasa eso en Alemania y NO EN ESPAÑA ni en general, el sur de Europa, donde también tenemos a millones de chavales árabes viviendo en nuestras tierras? ¿No será que algo falla en la sociedad alemana? A veces se ha llegado a niveles tan brutales allí de violación, que hombres han violado a OTROS HOMBRES durante el Oktoberfest. LEED, LEED. INFORMAROS.

Lo más triste de todo esto es que NADIE realmente de los que más comentan contra esos árabes reamente les interesa LAS MUJERES y la VIOLENCIA que sufren a diario en todo el planeta. Además de todo esto, tampoco pasa en USA – este país suele ser muy estricto para saber QUIÉN ENTRA y QUÉ ANTECEDENTES tiene. Una vez más, vemos que Alemania no tiene ni puñetera idea sobre cómo tratar los temas en el siglo XXI. Si no saben controlar sus propias fronteras ni sus propios problemas sociales, ¿qué nos hace pensar que tienen derecho, su gobierno, a enseñorear el resto de Europa?