Lejos estaba de imaginar Prince Boateng, un joven que le gustaba el fútbol y llegó a Alemania en 1981 para jugar en el modesto Reinickendorfer, que su contribución a futuro iba a ser tan importante. Con su primera esposa, Christina, tuvo a Kevin-Prince, en 1987. Separado apenas un mes después del nacimiento, se unió a Nina, quien en 1988 le dio a Jérôme.
En ciudades opuestas, unidas por un padre y el amor por el balón, comenzaron juntos en el Herta Berlin, donde rápidamente recalaron en los seleccionados juveniles de Alemania. A Kevin no le gustaba la rigidez del trabajo, era indisciplinado y aprovechando su otra nacionalidad y avalado optó por integrar el seleccionado de Ghana.
Kevin-Prince pasó al Tottenham inglés en 2007, y ese mismo año, Jérôme siguió en terreno alemán, pero en el Hamburgo. Desde entonces, se han vuelto a ver juntos en diversos encuentros, pero siempre con diferente escudo.
Una historia que el caprichoso fútbol no se ha cansado de repetir a lo largo de los años que ha girado:
- Paul Pogba (Francia) y Florentin y Mathias, gemelos Pogba (Nueva Guinea)
- Christian Vieri (Italia) y Max Vieri (Australia)
- Parfait Mandanda (República Democrática del Congo) y Steve Mandanda (Francia)
- Chris Cahill (Samoa) y Tim Cahill (Australia)
- Royton Drenthe (Holanda) y Giovanni Drenthe(Surinam)
- Thiago Alcántara (España) y Rafinha Alcántara (Brasil)
- Michele Andreolo (Italia) y Raymundo Andreolo (Uruguay)
- Chris Cahill (Samoa) y Tim Cahill (Australia)
- José Luís Vidigal (Portugal) y Lito Vidigal (Angola)
- Manfred Kizito (Ruanda) y Nestory Kizito (Uganda)
- Gerry Baker (EEUU) y Joe Baker (Inglaterra)
- Archie Goodall (Irlanda) y John Goodall (Inglaterra)
- Dave Hollins (Gales) y John Hollins (Inglaterra)
- Jim Brown (Escocia) y John Brown (EEUU)
- Jonathan de Guzman (holanda) y Julian de Guaman (Canadá)