Fábula en tono de comedia sobre los peligros de aceptar a ciegas todo lo que nos dan sin pensar en las consecuencias futuras. Para plasmar esta moraleja hacen uso de un piso reconvertido en genio de la lámpara que concede deseos infinitos a cambio de "hipotecar" la vida de sus protagonistas. Una metáfora muy directa ya vista anteriormente en cintas similares dentro del género fantástico, como la reciente The Room, aunque en esta ocasión con un tono más distendido cargado de un humor que con el paso de los minutos se va desvaneciendo conforme los hechos lo requieren. Una sátira sin complicaciones sobre nuestra sociedad de consumo voraz que, sin complicarse la vida, da que pensar a la par que entretiene.
Puntuación @tomgut65: 6/10