El exfutbolista brasileño y actual diputado federal Romário publicó este sábado 17 de marzo, en su página de Facebook, que el Mundial de 2014 podría ocasionar el mayor robo de la historia de Brasil.
“Brasileños, continúen cobrando y se manifestando porque esa payasada va a empeorar, cuando llegar a un año y medio de la copa. Lo peor aún vendrá, porque el gobierno dejará que acontezcan las obras de emergencia, las que no necesitan licitaciones. Entonces, va a suceder el mayor robo de la historia de Brasil. Yo quiero ver si las personas que aparecen sonriendo en la foto durante la reunión de ayer van a querer aparecer. Ese Brasil es un circo y los payasos Ustedes saben bien quienes son”, lo manifestó.
La declaración fue dicha tras el reciente encuentro entre la mandataria brasileña, Dilma Rousseff, y el presidente de la Fifa, Joseph Blatter, el cual ha participado también: el ministro de Deportes, Aldo Rebello, el embajador honorario para el Mundial de 2014, Pelé, además del consejero del Comité Organizador Local (COL), Ronaldo. La crítica de Romario se debió por la ausencia del presidente de la Ley General de la Copa, Renan Filho, del relator de la misma, Vicente, Cándido, y del presidente de la Cámara de los Diputados, Marcos Maia.
“Si continúan sucediendo cosas cosas erradas y raras como ese encuentro de Blatter con personas que no tienen que ver con la Ley General de la Copa, ella será una mierda. Y el Gobierno Federal está engañando al pueblo. Y la presidenta Dilma Rousseff está siendo engañada o dejándose engañar”, añadió Romário.
La Ley General de la Copa de 2014 aún no fue aprobada por los Senadores y Diputados brasileños, la cual trata principalmente sobre los privilegios de la Fifa durante las competiciones. Uno de los problemas es que la entidad mundial del fútbol no estaría de acuerdo a conceder entradas gratuitas para los ancianos o con descuentos a los estudiantes, conforme las leyes de la nación suramericana.
Recientemente, el diputado Romário ha criticado los retrasos en las obras de los juegos, y dijo estar de acuerdo con los reclamos del secretario general de Fifa, Jerome Valcke, excepto por la expresión de que Brasil debería llevar un “puntapié en el trasero”.