4
2014 Coaching personal
PARA SER FELIZ, BASTA CON DEJAR DE SER INFELIZ!
El ser humano tiene la necesidad de perseguir la felicidad en todas partes y en todo momento. Creo que es el gran error de nuestra Civilización actual, de la que por cierto viven muchas personas, empresas, instituciones… con métodos supuestamente infalibles y garantizados, miles de libros y supuestos manuales sobre ellos, infinidad de charlas y seminarios que prometen lograrlo. Yo mismo fui durante años un buscador compulsivo y, a la vez, consumidor de este tipo de recetas aparentemente mágicas! Lo único que crearon en mí es un nivel de autoexijencia y de ansiedad, lo que evidentemente me privó de la felicidad, aunque tal vez contribuí a la felicidad de muchos otros maestros, gurús y escritores presuntamente sabios e iluminados que se lucraron de mí tóxica adicción y alcanzaron su felicidad… económica! Ni qué decir tiene que yo por entonces y mientras durara el camino, me negué el derecho de amar y de ser feliz, privándome de las oportunidades que me regaló la vida para vivir instantes de felicidad!
Pero viviendo de verdad -y no gracias a la edad, como muchos creen- te das cuenta de que uno es feliz solo de una manera. Sabiendo crear y recrear momentos de felicidad y, sobre todo, renunciando a dejar de ser infeliz, que no es más que dejar de perseguir la felicidad, creando expectativas sobre ella e involucrando a alguien más en ello. La felicidad sale de dentro y no es más que una actitud en la vida de uno mismo, que nadie más puede aportar si tu no lo permites ni puede inducirte a ello. Una vez tienes el valor de vivir y de crear momentos felices, es verdad que puedes compartirlos con álguien más y la felicidad crece entre ambos.
Como todo largo camino que es la vida, todo empieza con un primer paso, sabiendo que la felicidad está en el camino y no es un estado al que hay que llegar. Y ese primer paso es sin duda decidir firmemente dejar de ser infeliz, sin necesidad de buscar razones en el pasado, en el presente o en el futuro. Si uno puede sentir la felicidad aunque sea en algunos momentos, ya está capacitado para ser feliz. Luego solo debe abandonar el viejo y tóxico hábito de la infelicidad y aprender a crear cada día más momentos de felicidad y también aprender a compartirlos con los demás! La mayoría de las veces pasa por aprender a invertir la misma energía que invertimos -sin darnos cuenta- en el mal hábito de ser infelices, en perseguir por fuera la felicidad eterna y/o en aceptar la realidad porque no es como la habíamos soñado, para lograr vivir esos momentos felices que la vida te trae a cada nuevo instante, con amor.