Ingredientes:
200 grs. de calabaza butternut u otra variedad dulce, sin piel ni semillas y cortada en dados
2 manzanas golden, peladas sin el corazón y cortadas en trozos
1 palito de canela
3 clavos de olor
1 trozo de jengibre del tamaño de un pulgar, rallado
6 cuch. de azúcar blanco (según el dulzor que queráis)
1 cuch. de cúrcuma molida
Una pizca de nuez moscada rallada
Yogur tipo griego (para acompañar)
Galletas digestivas (para espolvorear al final)
Elaboración:
Comenzamos echando los dados de calabaza y manzana en una cazuela mediana junto con el azúcar y las especias, cubrir con un chorrito de agua y colocamos a fuego bajo, dejando cocinar hasta que la calabaza y la manzana estén tiernas.
Pasado este tiempo, tendremos que retirar el palito de canela y los clavos de olor, pues ya han hecho su trabajo. Luego este preparado lo pasamos por la batidora, hasta conseguir una textura homogénea, ligeramente espesa y que nos recuerde a la confitura o mermelada. Retirar del fuego y dejaremos enfriar completamente.
Justo cuando vayamos a servir, majar en el mortero o si tenéis, en un procesador de alimentos unas cuantas galletas, del tipo digestivas, hasta que nos queden como si fuesen migas de pan. Verter un cucharón de confitura en un vasito, cubrir con un par de cucharadas de yogur griego y por encima espolvoreamos un poco de crumble de galletas, para crear un toque crujiente. Servir enseguida y que os aproveche!! :)