Harry Dean Stanton emerge de la vastedad del desierto al ritmo cautivador de las cuerdas de la guitarra de Ry Cooder y la hipnótica fotografía de Robby Müller. PARIS, TEXAS es una película dedicada a las imágenes, sobre las imágenes que construimos mentalmente de los demás y las terribles consecuencias que pueden tener cuando las personas no están a la altura de esa imagen ideada.
Wim Wenders realizó una película desde su visión europea y escéptica mezclada a la perfección con la sensibilidad estadounidense del escritor Sam Shepard. El resultado de todos los ingredientes es una película llena de carisma, belleza y poesía visual sustentada en su grandiosa imaginería y un tercer acto sublime. Esa Texas que parece una tierra mítica, recuerda a los westerns de Ford y Walsh, refleja la visión de Wenders de una nación.
La memoria, el pasado, la culpa y el deseo de encontrar un hogar. Considerando forma y contenido, PARIS, TEXAS es el mayor logro en la filmografía de Wenders y una de las grandes películas de los ochenta. Palma de Oro en Cannes.