El paisaje que rodea a Laguna Blanca es magnífico, con el fondo de los cerros del cordón del Chachil, que no están protegidos por el parque pero le dan un hermoso marco natural especialmente cuando sus laderas están nevadas
El paisaje es árido, típico de la estepa patagónica, con predominancia de hierbas y arbustos resistentes a las escasas precipitaciones, al calor del verano, el frío intenso del invierno y del viento. El parque tiene suelos de origen volcánico, se puede observar en rocas de coloración muy oscura o rojiza, además hay varios conos volcánicos de menos de 20 metros de altura que embellecen este singular paisaje.
La laguna es el sitio donde se congregan y reproducen varias especies acuáticas como flamencos, coscorobas, cisnes de cuello negro, pato crestón, gallaretas varias, playeros que llegan durante la primavera y el verano. También hay pájaros típicos de las estepas y también algunos andinos que en épocas adversas bajan algunos metros; un lugar bueno para observar alguno de estos pajaritos son los alrededores del corral de los caballos de los guardaparques.
Biguá (Phalacrocorax brasilianus)
Coscoroba (Coscoroba coscoroba)
Cacholote pardo (Pseudoseisura guturalis)
Comesebo andino (Phrygilus gayi) hembra
Calandria mora (Mimus patagonicus)
Comesebo andino (Phrygilus gayi) macho
Flamenco austral (Phoenicopterus chilensis)
Centro de visitantes
Algunos paisajes esteparios en la entrada del parque