La vez anterior no vi a Marina, una perra que hace aproximadamente fue mamá de cinco cachorritos, de los cuales uno murió y los otros ya es casi imposible tomarlos, por que son vivaces, aprendieron a meterse en las cuevas que los vió nacer. Me preocupa Marina, quiero saber como está. El solo pensar que le haya pasado algo, o esté agarrada en algún huache, mi corazón se apreta. Es una perrita muy tierna, pero quedó frustrada con la presencia de algunos humanos, imposible tomarla, a menos que sea a la fuerzas. Decido ir. La verdad que me da lo mismo el futbol, y en vez de quedarme esperando, prefiero disfrutar ese aire rico que me encanta y ver si logro ver a la Marina. Preparo todo, inclusive mi te, con un rico pedazo de queque con harina integral.
Las calles aún están colmadas de vehículos, parece que cuando hay partidos de futbol andan mas alocados por llegar lo antes posible para sentarse frente al televisor, mientras la parrilla está preparada para colocar un pedazo de carne. Y aunque no lo crean, en tiempos de partido de la selección chilena, el aire en la ciudad huele a asado. El aumento de smog se respira en el aire.
El camino está expedito, me salen a recibir como siempre, esperando mas que el alimento, una caricia de mis manos. Trato de que mis manos se multipliquen para no quedar mal con ellos.
Sigo subiendo.Me detengo en el sector donde habita Marina. La noche se dejó caer rápido, poco se divisa, a menos que sean las luces de un auto en la oscuridad. Grito su nombre como loca en medio del silencio, a lo lejos me responden con sus guau guau, los cachorritos y entre medio de los ladridos, hay uno que desconozco.
Ella, es una perra de raza golden retriever, temerosa, no deja de tocar a su pequeña que tirita y tirita con el frío de la noche. Intendo acercarme de manera suave para que no teman, la madre se asusta, está con miedo, pega un grito y arranca con su hija hacia los matorrales. Duele verlas asi, tan hermosas, y tan vulnerables en donde las dejaron. Les converso, trato de empezar a ganarme su confianza. Justo ahi, está el tacho para el agua, vacío y en el suelo, un alimento que desconozco. Decido alejarme. Voy al auto en busca de algo rico que les llame la atención. Me quedo de lejos conversándole, que no tengan miedo, que quiero estar con ellas. Habiéndome alejado deciden salir, una junto a la otra vuelven a observar que es lo que hago, siguen atentas. Mientras en la ciudad, grita goool de Chile ante Bolivia, en medio de la oscuridad hay un inocente sufriendo, soy testigo del sufrimiento de esa madre perra. La foto está tomada con zoom, casi a ciegas en la oscuridad.
Pero la pequeñita hermosa de collar rosado elegante, no se separa de la perra protectora que es su mamá. La madre se nota fina, y la cachorrita de seguro es mestiza, por eso la botaron. Quizás tu las conozcas, y podamos descubrir a los desgraciados que las fueron a botar. Miralas bien por favor.
No me pregunten ¿por que no me las traje?
Primero, sencillamente por que no tengo terreno para poder tenerlas, y segundo, por que estaban recien abandonadas, imposible tomarlas en la noche, arrancan hacia lugares donde es difícil adentrarse de día, imagense de noche, y sola. Si tu las quieres adoptar a las dos juntas, solo comunícate conmigo, haré lo imposible por sacarlas de allá, pero hay que tener paciencia para que la madre vuelva a confiar. Aqui no es ir y quitarle la cría a la fuerza, si lo vas hacer es mejor que te arrepientas, por que el daño que se les hace es enorme. Ponte en su lugar, una madre con su cría, le roban su hija, ¿Que sentirías tu si te pasara a ti?
Antes piensa, en hacerles el bien a las dos, de lo contrario no lo hagas.
En medio de la oscuridad traté de grabarlas, esto es lo que conseguí. Ahi se le nota el collar que le pusieron para alivianar su sucia conciencia, deben haber pensado que si la dejaban con collar elegante, sería mas fácil que se llevaran a la cachorrita, pero no les sirve de nada cuando hay una madre sufriendo.
Seguiré confiando en Dios que tarde o temprano esa persona que fue a botar a esta madre e hija, se le devuelva el daño que han causado.
Ganó Chile a Bolivia con un último gol casi al terminar el partido. Tanto dinero recaudado por el fin de un deporte, los futbolistas ganan millones y millones, y con solo algunos, podríamos hacer tanto en beneficio de los perros del camino.
Chi, chi, chi...le, le, le. Viva Chile
Pero aun seguimos siendo un pais sin cultura animal.
Con sentimientos encontrados.
Marcela
losperrosdelcamino@gmail.com
Los perros del camino?... son todos aquellos que de una u otra manera estando perdidos o abandonados, Dios los pone en mi camino cuando paso...y algo me dice: tienes que detenerte, no puedes seguir...