Ya es oficial, el pasado 22 de Septiembre se acabó el verano. Es hora de volver a los trabajos y academias y de dejar detrás helados, playas y tardes enteras de vicio a nuestros videojuegos clásicos favoritos y las nuevas adquisiciones. Y es que, como le gusta decir a Lord Eddard Stark, “Se acerca el Invierno”.
Con el fin del verano y la llegada del otoño se cierra también nuestra sección de “Un verano de Zelda”. Pero, como aún quedan juegos por ver y juegos por venir me gustaría “arrejuntarlo” todo en una gran “traca final” con la que hacer una visión general del pasado, presente y futuro de la saga Zelda ¿Nos acompañáis en este último viaje estival?
Como ya hemos visto, con la saga Zelda, Nintendo prefiere dejar la sobremesa para contentar a los fans, mientras utiliza las portátiles para atraer al nuevo público. Y, por supuesto, este par son claros “imanes de nueva sangre” para la saga, centrados en atraer a esa “Touch generation”: esos videojugadores que son incapaces de concebir una consola sin una pantalla táctil o un sensor de movimiento.
Es cierto, a ojos de un veterano este par de DS son juegos fáciles (llegué al ecuador del Phantom Hourglass en la misma tarde que lo estrené), infantiles y cortos (la primera mazmorra del “PH” sólo te dura unos cinco minutos), pero es que debemos entender que no son juegos para veteranos, sino para noveles. Igualmente hay que decir que son tan divertidos como cualquier otro Zelda, aunque te sepan siempre a poco.
Sobre Skyward Sword tenemos una cantidad de información modesta, pero sabemos que será grande. Visto lo visto es de esperar de él lo típico de cualquier otro videojuego de su saga: la mecánica de simpre, simple pero divertida, con lo ya aprendido a lo largo de los 25 años que lleva Link dando guerra, más las sempiternas innovaciones de cada entrega, que como dijimos antes contribuyen a la frescura de la saga del elfo. Entre estas innovaciones ya se ha mostrado el volar a lomos de pájaros, el utilizar aparatos a control remoto y, la más especial de todas, el control por movimiento del Wiimote, esta vez con la suavidad y precisión que la versión de Wii de “Twilight Princess” no supo dar en ningún aspecto. Próximamente os ofreceremos una preview en mayor profundidad cuando hayamos probado el juego en el Gamefest de Madrid.