¡¡Buen giorno a tutti!! Uffff espero que esté bien dicho o que alguien venga rápido y me corrija, jejeje.. en cualquier caso... ¡¡feliz viernes!! Ummm a estas alturas una ya está tan de cabea con el trajín de la rutina y la semana que ni se plantea que hace dos días tuvimos vacaciones, ¿verdad?... En fin, que falta nos hace un buen fin de semana.
Sip, hoy hablamos de libros... seguro que no descubro el Mediterráneo y que ya estás más que enterados de que ¡¡me chifla leer!! creo que entra dentro de mis 5 actividades favoritas... y gana con mucho muchísimo a una tarde viendo la tele o saliendo de tiendas... tanto en invierno como en verano... envuelta en la manta y tirada en el sofá, hasta las tantas metida en la cama (cómo me gustaba hacer eso... y cómo se nota la edad que me duermo con la luz encendida!!!), en un viaje de esos eternos donde puedes perderte en un libro durante horas y horas... o en la playa, en la terraza de casa mientras te da el solito.... ummmm!!! Como digo una de mis actividades favoritas.
En fin, voy a reconducir el tema, jejeje... este mes, concretamente el día 23 se celebra el día del libro y en su honor las anfitrionas del reto La Cocina Typical Spanish ha organizado el evento #entrelibrosandaelguiso, que consistía en que cada participante enviara una receta basada, inspirada o directamente aludida en un libro de literatura... ¡¡nada de libro de cocina!!, no... porque la cocina también está muy presente en la literatura y esta influye mucho en la cocina... teníamos que rescatar nuestros libros preferidos y cocinar con ellos en mente.
Yo, en cuanto leí en qué consistía el reto... y vale... ¡¡porque justo me estoy leyendo uno de sus últimos libros!!, decidí que sin duda mi receta iba a estar dedicada a Salvo Montalbano... el comisario gourmand de la serie de novelas de Andrea Camilleri.
Estas novelas de misterio, no muy extensas pero bien concentradas y sobre todo muy entretenidas se desarrollan en Sicilia, a la orilla del Mediterráneo, donde el comisario resuelve todo tipo de situaciones sin que ninguna de ellas le impida de disfrutar, vivir y crear rituales en torno a la comida... la suya propia, la del bar donde come a veces, la que le consienten las mujeres de su vida, jejeje... etc...
El hombre come, come muy bien, y no se corta en contárnoslo!! Conclusión: cada vez que veáis una de mis novelas de Montalbano veréis que tengo el libro subrayado con los platos de comida que el comisario degusta... y que prácticamente te deja probar... comida siciliana tradicional, platos marineros, pocos y buenos ingredientes y muy poca tontería... ¡¡la comida que más me gusta!!.
Así que en su honor he preparado este plato de pasta... pasta alla siciliana, su receta la he sacado del blog de Laura Vitale, otra italiana que disfruta muchísimo de la cocina y que empapa de pasión cada plato.
Es una pasta con salsa de tomate, berenjena, mozzarella fresca y hojas de albahaca, algunos la conoceréis también como pasta a la norma... espero que os guste... es, como el comisario, sencilla, completa y deliciosa!!.
Receta de pasta alla siciliana.
Ingredientes para 4 personas:
- 500 gramos de pasta corta a vuestra elección.
- 1 berenjena
- 400 gramos de tomate triturado
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo triturado
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce (opcional)
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
- 1 bola de mozzarella fresca
- Hojas de albahaca fresca
- Parmesano rallado
Modo de hacerlo:
1. Comenzamos preparando la berenjena que asaremos en el horno antes de añadirla al resto de la preparación. Por ello la cortamos en trozos medianos... queremos que se vean y se noten, y si los troceamos pequeños se trituraran al asarlos.
2. Precalentamos el horno a 200ºC calor arriba y abajo, forramos una bandeja de hornear con papel de plata, añadimos la berenjena, la salpimentamos y la regamos con un chorro de aceite de oliva.
3. Asamos la berenjena a 180ºC durante 15-20 minutos, mientras preparamos el resto del plato.
4. Ponemos una cazuela hermosa con agua salada con un buen puñado de sal al fuego, y cuando rompa a hervir incorporamos la pasta, removemos varias veces hasta que veamos que está suelta y la dejamos cocer unos 10-12 minutos.
5. Mientras preparamos nuestra salsa de tomate. Picamos bien menudo la cebolla y el ajo, que sofreímos en una cazuela en la que previamente calentamos un chorro de aceite, dejamos que se poche la cebolla y pasado ese tiempo vertemos el tomate triturado, salpimentamos, añadimos el pimentón y dejamos que el tomate se fría durante 15 minutos.
6. Pasado ese tiempo habremos sacado la berenjena del horno, habremos escurrido la pasta en agua fría y tendremos listo el tomate frito... nos queda, por tanto, trocear en tacos medianos la mozzarella y picar las hojas de albahaca.
7. Colocamos en la cazuela de cocer la pasta la salsa de tomate, la pasta ya cocida, añadimos la berenjena, la mozzarella y la albahaca y damos unas vueltas... para que la pasta absorva la salsa, se integren todos los sabores y la mozzarella se derrita.
8. Terminamos espolvoreando por encima un buen puñado de parmesano rallado y servimos caliente.
Ummm... cena en 20 minutos de esas de repetir!! Como podéis ver no tiene mucha ciencia pero queda deliciosa, una receta vegetariana que seguro es una manera perfecta de camuflar la verdura a vuestros hijos... en cuyo caso os recomiendo que la partáis más menudo y que se triture un poquito... así no notarán ni que está.
¿Os ha gustado? Espero que sí... ya veremos que otros libros han escogido mis compañeros y que recetario hacemos entre todos.
Un besazo grande... ¡¡y buen finde!!
Luz.