Pastel de almendras y zanahoria con glaseado de chocolate blanco y queso.

Lo primero que voy a deciros,
¡¡prohibido hacer este pastel!!! Porque os encantará, y no pararéis de comerlo. Su bizcocho es muy jugoso gracias a las almendras y a las zanahorias.

Con un delicado toque a especias, que invade toda la casa con su sutil aroma.
Por cierto, este pastel Sabor a Málaga tiene tan especial sabor, gracias a estas almendras malagueñas que tan valoradas están en el mercado gastronómico. Y al aceite tan bueno malagueño que tenemos, que en mi cocina no puede faltar.

 ¡¡Un rico pastel que os sorprenderá por su sabor!!
Ingredientes:
3 zanahorias
150 grs. de almendras crudas Almensur
150 grs. aceite de oliva extra virgen
150 grs. de harina bizcochona
150 grs. de azúcar
3 huevos
1 c/c de canela en polvo
1/2 c/c de jengibre en polvo
1 pizca de sal
1 pizca de nuez moscada
200 grs. queso crema Philadelphia
180 grs. chocolate blanco postres Nestlé
1 c/s mantequilla
60 ml. zumo de naranja
60 grs. azúcar glass
PREPARACIÓN:
Encendemos el horno a 180 grados.
Blanqueamos los huevos con el azúcar. Para quien no lo sepa, blanquear es integrar el azúcar con los huevos, con unas barillas hasta que se disuelva y aumenten de volumen.
Ahora es cuando ponemos el aceite y seguimos batiendo. Tamizamos la harina, las especias, la sal y vamos agregando en varias veces hasta que no queden grumos.
Lavamos las zanahorias y raspamos la piel. Podemos rallarlas, o como en mi caso las puse en la thermomix, las trituré y añadí a la masa. Sólo nos quedan las almendras, que también las pasé por la thermomix y las hice muy picadita.
Así que agregamos las almendras y las incorporamos bien en la masa.
En esta receta he utilizado un molde de silicona. Así que no necesitio nada más, sólo agregar la masa y meterla al horno unos 45 minutos a 180 grados. Como ya sabéis, por arriba y por abajo.
Siempre pinchamos hasta que salga limpio, ya que todos los hornos no son iguales. A la media hora suelo ponerle papel sulfurizado, por que no me gusta que se dore mucho. Bueno, más bien para que no se queme.

Ahora nos ponemos con el graseado de chocolate blanco y queso.
Batimos el azúcar con el queso. Y por otro lado ponemos el chocolate con la mantequilla al microondas, de 20 segundos en veinte segundos, a una potencia baja para que no se queme el chocolate.
A la mezcla del queso le agregamos la del chocolate y también el zumo de naranja. Y batimos hasta que quede una crema fina.
Sólo nos queda la presentación del pastel. Al bizcocho le agregamos el graseado. Y listo para saborear el riquísimo pastel.
Ya me contaréis si os gustó el pastel que lo hice al tuntún.
los pucheritos de inma