Pastel de boniato, verduras y carne al horno sin lácteos ni gluten

Hoy traigo un pastel de boniato, verduras, carne y queso vegano. Es una forma de comer verduras deliciosa y sin lácteos ni gluten. ¡Queda espectacular!

Presento esta recetilla para el Reto Color y Sabor de Temporada , que este mes proponía boniato o anacardos, y como estos últimos me dan alergia y amo el boniato...¡Pues fue fácil decidir!
En serio, desde que llegó el boniato a mi vida soy mas feliz jajaja me encanta dar el punto agridulce a los platos con él, hacermelo asado, cocido, en el horno como chips... ¡Es tan versátil!

El otro día me dijeron tras la gastroscopia que tengo hernia de hiato y una gastritis crónica antral, por lo que tengo que tener cuidado a la hora de comer, aún mas que lo que lo tengo con la histamina y los lácteos. Cuando la gente me dice qué como le digo que muchas cosas... el reto está en cocinarlas de formas diferentes y deliciosas y sustituir mis alimentos prohibidos por otros similares aptos. Es dificil, sí, las intolerancias son complicadas y más cuando tienes varias juntas. Pero desde luego se supera y, cuando estás mejor, agradeces no haber comido esos alimentos. Ahora me han eliminado las cosas ácidas, los fritos al máximo posible y que no queme las cosas (amo tostar todo hasta niveles de churrascarlo todo ajajaja)
Esta receta puede hacerse con variantes, si eres vegano se le puede quitar la carne y quedará delicioso y si no tienes intolerancia a los lácteos puedes poner queso rallado normal. ¡Tu eliges!

Ingredientes para 2
Un boniato de 300 grmedia cebolla200 gr de carne picada de ternera2 pimientos verdes y 2 rojos italianosMedia bolsa de queso vegano ralladoaceitesal

Elaboración:
En primer lugar, poner el horno a precalentar a 180 grados. Mientras se calienta, pelar el boniato y cortarlo en láminas finitas. No pasa nada porque al colocarlas en una bandeja queden apiladas, porque buscamos que se queden blanditos, no crujientes. Un truco para que no se peguen es echar un poco de aceite en la fuente de horno y con un trocito de boniato extenderlo por toda la fuente, así no usas mucho aceite y nada se pega. Lo metéis al horno unos 20 minutos.

Mientras se va haciendo el boniato, se van a ir preparando las verduras. Cortamos los pimientos en tiras y los metéis en el Lekue con un poquito de aceite y sal, unos 5 minutos. Si no tenéis Lekue podéis o bien meterlo en un cuenco especial de microondas tapado con film transparente con unos agujeritos o bien hacerlo en la sartén.

Cuando se hagan los pimientos, comprobar que están blanditos. Luego los ponemos en un cuenco y los reservamos.

En el mismo Lekue o siguiendo la misma técnica que hayas seguido con los pimientos, se corta la cebolla en tiras y se mete al microondas, esta vez con 3 minutos nos vale. Luego se reserva también.

En una sartén, se pone un poco de aceite y se dora la carne picada al gusto. En mi casa nos gusta muy hecha, pero eso lo decide cada uno. Eso sí, que quede bien desmigadita, por lo que conviene ir aplastándola con una espátula de madera mientras se cocina.

Cuando esté a tu gusto se deja en la sartén apagada y se reserva.

Cuando el boniato esté hecho lo sacamos del horno. Si véis otra bandeja es porque yo hice dos tandas a la vez y con la bandeja cuadrada anterior no me cabían dos jajaja por lo que tuve que pasar el boniato a otra distinta.

Ahora empezamos a poner capas, primero la de pimientos, que extendemos bien por toda la bandeja.

Luego añadimos la cebollita, también bien extendida.

Luego seguimos con la carne picada, intentando que haya en todas las zonas.

Por último le agregamos el queso vegano. Si no tienes intolerancia y prefieres queso normal pues, perfecto. Lo metemos al horno, poniendo el grill.

Gratinamos al gusto, he de decir que por mucho que gratinemos, el queso vegano no quedará crujiente, solo blandito, pero queda delicioso.


Luego se sirve en cada plato, yo lo cojo y lo voy echando porque me encanta ver la variedad de colores, pero si veis que preferís ponerlo como un pastel, también podéis hacerlo.