Me encanta experimentar con la cocina popular de otros países. Me identifico con las madres cocineras (o padres) que tienen que pensar en lo que van a cocinar para su familia, ir a comprar los ingredientes y preparar el plato con cariño y todo el peso de la tradición.
Vi hace meses en Canal Cocina un programa en el que aparecía Matthew Scott preparando este suculento plato único y comentaba el delicioso aroma a carne asada que se respiraba por la cocina.
En mi casa son carnivorines, así que, hoy decidí hacer este magnífico pastel de plato único para que así sobre para mañana lunes y puedan mis chicos comer de sobras. Con un puré de patatas de acompañamiento y salsa de tomate consigo aportar el resto de nutrientes.
Para 8 personas:
- 1 Kg de carne picada de ternera
- 1 cebolla no muy grande
- 1 rama de apio
- 2 dientes de ajo
- 1/4 de pimiento rojo (o 3 cucharadas de pimientos asados en conserva en tiras)
- 3 huevos grandes
- 1/4 taza de leche
- 2 cucharadas de pan rallado
- un puñado de perejil fresco picado
- sal y pimienta
- un poco de orégano
- cayena (opcional)
Para el acompañamiento:
- 3 patatas
- un taco de mantequilla
- leche
- nuez moscada
- salsa de tomate casera
Se precalienta el horno con calor arriba y abajo a 180ºC. Se ponen en un bol grande o ensaladera los huevos y se baten un poco, se agrega la leche y la carne picada.
Se incorporan las verduras (cebolla, apio, pimiento y ajos) picadas muy finas, el pan rallado, el orégano y el perejil picado y se salpimenta.
Se forra un molde alargado de los de bizcocho con un papel sulfurizado y se dispone la carne en su interior, apretando un poco para que no haya huecos.
Se introduce en el horno y de asa durante 1 hora y media, aproximadamente. Si es necesario se tapa los últimos 15 minutos con un papel de aluminio para que no se seque en exceso la superficie.
Mientras se está horneando se cuecen las paptatas, enteras y sin pelar en abundante agua salada con un diente de ajo y laurel. Yo lo hago en olla express y las mantengo 20 minutos de cocción.
Se dejan enfriar, se pelan tirando de la piel suavemente con los dedos y se ponen en un bol. Se machacan con un tenedor y se mezclan con leche, mantequilla y una pizca de nuez moscada. Se revuelve bien hasta que quede en textura de puré.
Se desmolda el pastel y se sirve acompañado del puré de patatas y la salsa de tomate casera.