¡Hola a todos! Regresamos en las últimas bocanadas de agosto con un postre helado que hará el deleite de casi todos en casa. No quería despedir este mes de vacaciones por excelencia con esta receta tan versátil e ideal para los más golosos.
La idea de unir pastel y helado es una delicia difícil de resistir. Este postre americano, es perfecto como idea de cumpleaños cuando las altas temperaturas no nos permiten elaborar cremas y decorados que muchas veces no resisten y nos causan más de un dolor de cabeza.
Es un postre fresquito, que rellenaremos con nuestro helado favorito y decoraremos como más nos apetezca. Las opciones son ilimitadas y seguramente deliciosas. Se elabora fácilmente y sacamos del congelador cuando nos apetezca una rebanada. Así de fácil. ¿Qué os parece la idea?
Pasamos a la receta:
Ingredientes: Para un molde de plum cake mediano.
Para el bizcocho:
- 230 grs. harina de trigo
- 1 cdta. levadura en polvo
- 1/4 cdta. bicarbonato sódico
- 1/4 cdta. sal
- 1 cda. extracto de vainilla
- 85 grs. mantequilla a temperatura ambiente
- 1 huevo a tempera ambiente
- 200 grs. azúcar
- 80 grs. yogur griego
- 160 ml. leche a temperatura ambiente
- 40 grs. pepitas chocolate
Para el relleno:
- 1 tarrina de helado de stracciatella (o al gusto) aproximadamente de 800-900 ml .
Para la cobertura:
- 100 grs. chocolate cobertura
- 50 ml. leche o nata para montar
- Sprinkles de estrellas y cofetti
- 1 cdta. golden syrup o miel
Preparación: Comenzamos batiendo la mantequilla con el azúcar. Una vez esté espumoso añadimos el huevo y la vainilla. Cuando esté bien integrado añadimos el yogur y después la leche.
Precalentamos nuestro horno a 180 grados mientras vamos tamizando todos los ingredientes secos. Es decir, la harina, la levadura, el bicarbonato y la sal. Luego incorporamos a la masa en varios pasos. Una vez nos quede una crema homogénea, agregamos las pepitas de chocolate.
Vertemos en nuestro molde rectangular bien engrasado o recubierto con papel vegetal. Horneamos unos 50 minutos o hasta que el palillo salga limpio.
Dejamos enfriar completamente. Con un cuchillo de sierra, cortamos 2 capas longitudinales. Volvemos a nuestro molde forrado de nuevo con papel vegetal o film transparente en el que montaremos nuestro pastel helado.
Sacamos la tarrina del congelador y dejamos atemperar unos 10-15 minutos. Montamos la capa base de nuestro pastel y rellenamos con la mitad de nuestra tarrina. Lo extendemos bien con la ayuda de una espátula. Ponemos la siguiente capa de bizcocho y rellenamos con el resto del helado. Tapamos con el copete del pastel. No haremos presión ya que el helado puede salir disparado por todos los rincones del molde y eso no nos interesa.
Cubrimos con papel film y llevamos a la nevera un mínimo de 8 horas. Recomiendo dejarlo toda la noche y al día siguiente estará perfecto.
Ya sólo nos queda preparar la cobertura. Para ello disolvemos el chocolate junto a la leche en el microondas en tandas de 20 segundos. Cuando casi esté, agregamos una cucharadita de miel o golden syrup. Añadimos al pastel y decoramos con los adornos de azúcar que queráis. Yo utilicé estrellas de chocolate y fideos de colores estilo confetti. Volvemos al congelador. Lo retiramos unos 15 minutos antes de servir. Cortamos a rebanadas. Lo consumiremos durante la semana.
¡No me digáis que no es tentador! Buen apetito!
¿Qué tal? Espero que hayáis disfrutado de esta receta que está inspirada en la propuesta de Sally's Baking Addiction y que tanto ha gustado en casa. Es ideal para cualquier ocasión y una auténtica sorpresa si lo hacéis para celebrar un cumpleaños. Les fascinará a los peques. Despedimos agosto con este postre helado que nos encanta y volveremos en septiembre con muchísima ilusión.
¡Un saludo muy dulce!
Maribel García 🍓🍓🍓