Los pasteles son los postres por excelencia para endulzar toda clase de eventos, desde cumpleaños hasta bodas. Y claro, siempre buscamos aquel que tenga el sabor y relleno que más nos apetezca; pero sobre todo, que tenga una presentación y decorado atractivo, de acuerdo a la ocasión.
Apuesto a que nadie en este enorme y súper poblado planeta se resistiría a una deliciosa rebanada de pastel. Es por eso que en las fiestas puede faltar el licor, la música, o lo que sea, menos el pastel.
Un aplauso para los reposteros que nos brindan un amplio abanico de opciones para endulzar el momento cumbre de nuestras celebraciones con sus creaciones únicas y exquisitas. Y pido un aplauso aún más fuerte para aquellos pasteleros que llevan la repostería más allá de lo imaginable y convierten un pastel en una auténtica obra de arte.
Se tratan de esculturas de pastel, cuya técnica hace que estos postres asemejen a cosas reales, de una manera sorprendente. Hay desde pasteles que parecen tiernos animales, hasta pasteles de órganos humanos como cerebros, corazones, etc. También hay pasteles un poco más asquerosos, que son de animales arrollados… con sus intestinos de fuera.
A continuación verás algunos pasteles que seguramente te van a hacer dudar que en realidad sean un simple pastel.
Como este dulce –literalmente- perrito que daría remordimiento cortar, ya que, además de ser un pastel muy bello, ¡parece un perrito de verdad!
Para el siguiente pastel, he de decir que no odio a los reptiles, pero definitivamente no soy su fan número 1. Aunque sí lo sería de este maravilloso pastel, del cual admito que si viera en mi mesa, sin saber que es un pastel, me aterraría, pues su realismo es ASOMBROSO.
Parece difícil de creer, pero este busto de Maléfica es un dulce, dulce pastel. Es impresionante el gran parecido que el postre tiene con la bella actriz Angelina Jolie. ¡El talento que se necesita para que una mezcla de huevos, leche y harina parezca tener vida!
Este pastel es, digamos… ¿surrealista? No estoy segura de qué concepto aplicar con este pastel; pero sí puedo afirmar que es un pastel extraordinario. Definitivamente no vas a encontrar uno igual en la pastelería más cercana de tu hogar.
Aquí vemos a una garrapata succionando la sangre de un desafortunado sujeto. Nótese el gran detalle de la artista al aplicar cierta rojez en la piel para darle más realismo, además de rellenar la garrapata con jarabe de cereza, para que al cortarla se derrame y parezca que es la sangre que succionó.
Este pastel seguramente sería la pesadilla hecha postre para alguien que odie a los insectos. Cualquiera pensaría que es una cucaracha de Madagascar gigante; sin embargo, no es más que un exquisito pastel relleno de crema Boston.
Aunque parezca que te estás comiendo a tu mascota de la infancia, estos adorables hámsteres son unos pastelitos tan deliciosos como se ven.
¡Cuidado! Ese cup cake puede morderte antes de que tú lo muerdas a él…
No puedo encontrar la diferencia entre este pastel y un tenis real.
Juro que pensaría que al cortar ese pavo encontraría carne tierna y jugosa en lugar de un pastel.
Si viste la película de Beetle Juice, seguramente no vas a tener problemas en encontrarle lógica a este pastel. Me encantó este pastel; ya que este personaje me simpatizó muchísimo desde la primera vez que vi la película. Es curioso como un personaje que apenas y apareció unos instantes al final del filme dejó huella en muchos de nosotros.
La creatividad y los temas para hacer pasteles realistas no tienen límites. Las fuentes de inspiración van desde animales, películas, objetos, comida real, etc., que pueden dar como resultado pasteles tiernos, aterradores y hasta sangrientos.
Las esculturas de pastel son una muestra de que con creatividad y dedicación se puede hacer arte con las cosas más simples e inimaginables.