Habrá que encender el horno si queremos probar estos pastelitos, aunque siempre cabe la opción de pasarlos por la plancha o hacerlos en fritura. Estos días atrás por la redes se hablaba de que ya puestos a pasar calor lo mismo era encender el horno que estar sobre/encima de los fogones, que a fin de cuentas lo que más "duele" es estar al lado de la llama, mientras los demás se dan sus chapuzones en el agua. ¡Qué sacrificados somos los cocineros! jjj.
Yo, los veo fenomenales para el verano, es un plato que se presta bien para dejarlo hecho y en el último momento llevarlo a gratinar mientras ponemos la mesa. Seguro que ese día los niños comerán pescado ya que además están muy ricos y al escoger hornearlos conseguiremos restar algo de calorías. Os animo a probar, no dejéis de decirme si gustaron.
- Merluza limpia en filetes y descongelada 450 g.- Patatas 400 g.- Puerro (parte blanca) ½.- Huevos 3.- Mantequilla 30 g.- Sal, pimienta negra molida, nuez moscada, perejil.- Pan rallado.
Elaboración:
Pon agua al fuego, no demasiada, y sala. Cuece la merluza hasta que blanquee. Retira a un plato. Desmenuza.
En esa misma agua, si es poca añade algo más, cuece las patatas peladas y troceadas. Retira, añade la mantequilla y chafa con un tenedor.
Pica muy menudo el puerro y ponlo en un cuenco. Añade la pimienta, la nuez moscada, el perejil y dos de los huevos batidos. Une con la merluza y el puré de patatas. Comprueba la sal.
Cubre el fondo de una bandeja con papel sulfurizado y ve poniendo porciones parejas de la mezcla que hemos redondeado, aplastado ligeramente e impregnado con pan rallado.
Pincela con el huevo restante batido e introduce los pastelitos al horno con el gratinado. Espera que tomen color y sirve sobre un lecho de ensalada variada.