¿Una magdalena salada? ¿De verdad?
Cada vez que veo estas magdalenas, pienso en la actriz Miranda Hart, indignada en uno de los episodios de su serie "Miranda" porque Gary, su amigo/love interest, que es cocinero, aparece en su tienda para ofrecerle a probar una nueva receta: un pastelito salado. Indignadísima, Miranda dice: "A savoury muffin? Life is full of enough dissapointments, Gary. A savoury muffin? I don't know you anymore". Eso sí, acaba marchándose, dándole otro bocado a la muffin.
Y es que aunque suene raro, y choque al principio, no son tan raras, aunque si poco comunes por estos lares.
Estas las preparé para el primer NikPikNik, un poco pasado por agua, todo hay que decirlo, pero, hombre, estamos en Bilbao que tiene su propio microclima (#BilbadoTropikala). El caso es que no fui el único que preparó savoury muffins.
De hecho, a falta de una receta, hice dos, pero la otra necesita un par de ajustes antes de ser publicada en este nuestro blog. Por ahora nos quedamos con estos pastelitos salados.
Recomendadísimas, para tomar con un txakoli o un zurito, bajo un cielo gris bilbaíno con amigos de toda la vida, y amigos nuevos.
Pastelitos de queso de cabra con aceitunas
Adaptado de una receta de "Taller de pastelitos y muffins" de Sacha Maris.
Seguí la receta a mi manera, esto es: cambié cantidades y en vez de usar mantequilla salada, que no tenía, le eché más sal y listo. Lo divertido de esta receta, como todas, es usar la base como eso, una base, y probar con distintos rellenos. Eso sí, recomiendo que echéis queso a mansalva si os gusta, pues el sabor se pierde un poco con la fuerza de las dos aceitunas.
En vez de yogur griego, se puede utilizar un yogur normal, o leche fermentada.
En cuanto a medidas, el usa "pizca" como medida es algo muy americano, y de hecho mi juego de cucharitas, además de las clásicas Tablespoon (cucharada), teaspoon (cucharaditas) y las medias de cada, tiene una mini cuchara llamada pinch (pizca), que equivale exactamente a eso, a una pizca cogida con los dedos. Así que tres, si usáis mantequilla normal, y dos si usáis mantequilla salada. Pero, como siempre, la sal es a gusto de cada uno. Yo, como tengo que tomar menos sal, si las hiciera para casa tendrían como mucho una sola pizca de sal, puesto que las aceitunas ya son suficientemente saladas, además de tener 60 g. de queso parmesano.
Para 9 ó 10 pastelitos.
180 g. harina
2 cucharaditas (tsp.) de levadura en polvo
3 pizcas de sal
60 g. queso parmesano rallado
2 huevos
50 g. mantequilla, derretida
125 g. yogur griego
150 g. queso de cabra
75 g. aceitunas negras picadas
75 g. aceitunas verdes picadas
Precalentar el horno a 180ºC.
En un bol mediano mezclar la harina, la levadura y la sal. Incorporar el queso parmesano.
En un bol grande batir los huevos, la mantequilla derretida y el yogur griego. Una vez bien incorporado, añadir la mezcla de harina y batir hasta que la masa sea homogénea.
Por último añadir el queso de cabra despedazado y las aceitunas. Usar una lengua de silicona para incorporarlos.
Dividirlo entre los moldes de pastelito/muffins.
Hornear durante 40-45 minutos.
Dejar enfríar.