Además me gusta comerlas con las pieles, quedan muy crujientes y les da un toque único. Eso si, hay que lavarlas muy bien bajo el grifo y quitarle todos los restos de tierra.
Las cantidades son aproximadas, porque realmente puedes hacer tantas cuanto quieras y especiarlas al gusto.
- 4 o 5 patatas, pequeñas o medianas (las grandes van a tardar mucho en hervirse)
- Dos cucharadas de aceite de oliva virgen
- Especias: Ajo en polvo, pimentón dulce o picante, pimienta negra, sal
- Cebollino o perejil fresco, el cilantro fresco también queda muy bien
Las patatas enteras puedes cocinarlas en el microondas, en 8 minutos estaran listas. O hervirlas enteras en agua, y dependiendo del tamaño estarán listas de 15 a 25 minutos. Para comprobar que estan cocinadas, solo hay que pinchar con una puntilla o cuchillo y comprobar que están tiernas por el centro. Si le falta un poco, casi mejor, se terminarán de cocinar en la sartén.
Deja templar las patatas para no quemarte, y cortarlas en gajos, primero por la mitad, y luego cada mitad en dos o tres trozos a lo largo.
En una sartén añade dos cuchara de aceite de oliva, que les da un toque de sabor que me encanta. Y cocínalas hasta que estén doradas por todos sus lados, se ponen crujientes. (De pensarlo ya se me va haciendo la boca agua)
Ponlas en un bol o recipiente hondo que te permita mezclar con soltura. Añade las especias (ajo en polvo, pimentón dulce o picante o un poco de ambos, pimienta negra, sal) eso te lo dejo a tu gusto. Aunque como consejo, de primeras no adereces mucho para no pasarte, añade un poco de cada una y mezcla con cuidado de no romperlas. Pruébalas y si quieres añadir un poco más de alguna especia, ahora es el momento.
Y ahora sólo te queda disfrutarlas en buena compañía, espero que os guste tanto como a mi!!
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