Patético, ca

Publicado el 05 diciembre 2013 por Crysolidan
Que es capaz de mover y agitar el ánimo infundiéndole afectos vehementes, y con particularidad dolor, tristeza o melancolía.
(Artículo escrito por VitoCorleone)
******Calificamos de patético a lo que nos produce un profundo sentimiento de tristeza. Para el diccionario de la Real Academia, patético es lo que nos puede mover y agitar el ánimo infundiéndonos afectos vehementes, y con particularidad dolor, tristeza o melancolía.
Según el Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Castellana, de Joan Corominas, la palabra patético nos llega del griego pathetikos y ésta de epathon (“sufrí o experimenté un sentimiento”)http://etimologias.dechile.net/?pate.tico
Este dolor o tristeza o melancolía lo puede provocar la conducta o actitud de la gente. Y así es como usamos comúnmente esta palabra. Es más usual llamar patética a una persona que a una cosa; más comúnmente tildamos de patética a una persona irracional que a un paisaje triste o meláncolico. Aunque, vale decirlo, en ambos casos es correcto aplicar el adjetivo de patético.
Cuando tenemos noticias de que hay gente de la farándula que se niega a envejecer con dignidad, a aceptar el inevitable paso de los años, y se vale de recursos con los que supuestamente se verá joven tenemos un sentimiento de patetismo, sobre todo cuando vemos que, además de que los resultados no son satisfactorios ponen su vida en riesgo. Sentimos tristeza por esas personas. Incluso, sentimos lástima. Eso se llama patético. Ejemplos hay muchos.
Al principio de la novela La tregua, Mario Benedetti nos da un buen ejemplo del uso de este adjetivo:
“Tuve una prima solterona que cuando hacía un postre lo mostraba a todos con una sonrisa melancólica y pueril que le había quedado prendida en los labios desde la época en que hacía méritos frente al novio motociclista que después se mató en una de nuestras tantas Curvas de la Muerte. Ella vestía correctamente, en un todo de acuerdo con sus cincuenta y tres; en eso y lo demás era discreta, equilibrada, pero aquella sonrisa reclamaba, en cambio, un acompañamiento de labios frescos, de veinte años. Era un gesto patético, sólo eso, un gesto que no llegaba nunca a parecer ridículo, porque en aquel rostro había, además, bondad. Cuántas palabras sólo para decir que no quiero parece patético”. ******
¡Gracias VitoCorleone!... ¡Hasta la próxima palabra de corte ascético! ;-).